«Lo que proponemos hacer es caracterizar la variabilidad mensual de parámetros biogeoquímicos, biológicos y de calidad de aire para lograr una base de datos más representativa del ecosistema del río y de las zonas aledañas», dijo Picolotti en una entrevista concedida al diario La Nación.
La secretaria de Medio Ambiente explicó que eso le permitirá a la Argentina tener «una base de datos suficientes para alertar a la población en caso de que haya una variabilidad en el ecosistema del río y tomar todas las decisiones que haya que tomar ante esas variaciones».
«Este plan significa que nos estamos preparando. Con esto, lo único que buscamos es acompañar desde el punto de vista técnico el proceso de negociación y legal que lleva adelante la Cancillería.
«Esto se hace sin perjuicio de los reclamos que hace la Argentina por la relocalización», agregó. Picolotti explicó que «tenemos que terminar de ajustar cuestiones técnicas y administrativas. Mantuvimos muchos diálogos con Cancillería, y queremos estar bien combinados allí también para que lo que hacemos sirva a la estrategia internacional del país». La instalación de la planta papelera de la empresa finlandesa Botnia sobre la margen uruguaya del río limítrofe entre los dos países es objetada por el gobierno argentino por la eventual contaminación que su funcionamiento provocaría.