Los trabajadores del sector se encuentran “en estado de alerta” a raíz del anuncio público de una tregua de 90 días acordada por Argentina y Uruguay, que contemplaría la detención de las obras.
El número dos del Sunca, Fabián Gadea, explicó que quieren garantías de que durante la paralización de las obras los 1.800 obreros sigan cobrando sus salarios, y el ciento por ciento mantenga sus puestos de trabajo si se reanudan.
En Fray Bentos planean realizar un paro y movilización el jueves en pos de defender los puestos de trabajo de los casi 1.800 operarios que ya dependen de las pasteras.
Sardena señaló que, al margen de los 1.800 empleados en forma directa en las plantas, “tenemos otras 1.000 personas en diferentes obras y emprendimientos y 2.000 personas más en transporte, servicio y alquileres”.
La medida de fuerza será confirmada en caso de que no prosperen las negociaciones que los trabajadores de la construcción iban a mantener con autoridades uruguayas y con representantes de las empresas. Aguardan que se informe oficialmente la paralización por 90 días de las obras, tal cual acordaron los presidentes de Argentina Néstor Kirchner y el de Uruguay, Tabaré Vázquez, el sábado.
En este sentido, reveló su desconfianza. “Cuando se dice que se para una obra por determinado tiempo, nunca se han cumplido esos plazos”, indicó. Por ese motivo, los trabajadores de la construcción buscarán asegurarse “muy bien antes de dejar la planta” que la detención de los trabajos no les provoque ningún daño.
Por otro lado, Gadea aseguró que el Sunca está a favor de la construcción de este tipo de emprendimientos, porque entiende que “es la única forma en que acá vamos a tener un país productivo”, mientras que Sardena afirmó que el sindicato que conduce no permitirá que la gente “tenga que volver a comer en las ollas populares o que el pueblo vuelva a enterrarse de cabeza”.
