ANALISIS DE AGUAS
El primer lugar, el jefe comunal brindó detalles de los resultados de las muestras obtenidas en las aguas del río Uruguay tras los episodios de dermatitis en un centenar de turistas del balneario Ñandubaysal, publica hoy El Argentino de Gualeguaychú. En este camino, dicen, admitió que tanto los estudios encargados por Ambiente de la Nación como los encomendados por el Municipio “no arrojaron variaciones respecto a lo que venía ocurriendo con el río en los últimos días”.
“Sì se halló –reconoció- que el color estaba un poquito más turbio y con un nivel más elevado de materia fecal, pero no pueden ser atribuibles al episodio con los bañistas”, puntualizó.
DECÍA EL TELÉGRAFO DE PAYSANDÚ DEL 23 DE FEBRERO..
Bajo el título “La búsqueda de efecto y la ignorancia de un jerarca”, se expresan duramente contra los asambleístas y el gobierno de Gualeguaychú. Ponen de relieve, entre otras cosas, que este “haya emplazado a la empresa UPM-Botnia a “demostrar” que no es la culpable de esta contaminación de las aguas, invirtiendo la carga de la prueba”.
TEXTUAL…
“con un río Uruguay muy crecido, al punto que las playas no existen en Colón, Paysandú y Concepción del Uruguay, estaban habilitadas las del balneario Ñandubaysal, que tiene anegadas amplias zonas de arena e incluso están con un metro de agua quinchos de veraneo en la costa”.
Un río crecido, y peor aún, en forma persistente desde hace meses, no es para nada recomendable para baños, y en realidad si no se ha inhabilitado Ñandubaysal por las autoridades, que no pueden garantizar la calidad de las aguas, se debe a la controvertida decisión de no afectar los intereses turísticos de la ciudad y de los operadores del área. Quiere decir que la gran responsabilidad por estos hechos recae sobre las autoridades de la vecina orilla, porque un río con alto volumen de artículos de suspensión, carga bacteriana y arrastres diversos al invadirse amplios sectores de la costa río arriba es una amenaza real para los bañistas, al exponerlos a riesgos innecesarios.
lejos de aguardar los resultados de análisis y la evaluación técnica del episodio, los activistas, con la complicidad de algunas autoridades argentinas que están muy lejos de asumir sus responsabilidades, siguen en sus trece y procuran dar un golpe de efecto a su favor, teniendo en cuenta que necesitan desesperadamente un vuelco poco menos que milagroso para su desgastada campaña, que cuenta cada vez con menos respaldo en la propia Gualeguaychú.
Y mientras en la vecina orilla se siga con paños tibios ante quienes han dado una y otra vez pruebas de delirio, intolerancia e irracionalidad, poco y nada de positivo puede esperarse en favor de estrechar la hermandad de los pueblos de ambas orillas”.