Ese estudio señaló además que los deshechos, tanto de Botnia como de Ence alterarán el funcionamiento del sistema hepático de los peces y provocarán daños en su sistema reproductivo. Los investigadores advirtieron que “la mayoría de los efectos serán subletales y crónicos”.
Ante tamaña aseveración, Igorra manifestó que hay otros estudios favorables a la instalación de las pasteras a orillas del río Uruguay y aseguró que intentó acceder al informe elaborado por la Facultad de Ciencias, pero que sus autores se negaron a entregarlo. “Se me dijo que era reservado”, contó.
El funcionario uruguayo declaró también que “no sabemos si es un informe técnico. Se precisa saber qué modelo se usó y cuáles son las comprobaciones científicas, porque si bien la duda es el motor de la ciencia, si no hay comprobaciones científicas, es ficción”.
Los investigadores rechazaron los cuestionamientos. Además de ser estatal, la Universidad de la República –de la cual depende la Facultad de Ciencias– es la más antigua de Uruguay.
“Queremos adelantarnos al problema y tenemos la obligación moral de prevenir al gobierno y al pueblo sobre las consecuencias que pueden tener (las plantas) si no se hacen las cosas bien. Ese es el sentido del informe, que no pretende frenar nada, sino que se hagan las cosas correctamente”, precisó a Radio Mitre Ricardo Cayssials, uno de los docentes que participó en la elaboración del estudio.
El investigador puntualizó que se trata de “un informe armónico y multidisciplinario”. Estimó también que el gobierno de Vázquez lo pone en duda porque “hay muchos intereses en juego y nosotros estamos al servicio del pueblo uruguayo, para contribuir con nuestra humilde opinión a que se solucione el problema, ya que no podemos seguir enfrentados con el país hermano de Argentina”.