En efecto, el subsecretario de Integración Económica del ministerio de Relaciones Exteriores, Eduardo Sigal, declaró tal como antes había manifestado Urribarri, que no conoce ningún estudio que demuestre que Botnia haya dañado el ambiente. “Yo no vi ningún trabajo que dé la información que la pastera contamine. (Pero) no conozco ningún informe que diga lo contrario”, dijo el funcionario. Sigal opinó que “en el tema de las pasteras, los gobernantes deberían tener una postura comprensiva, para apostar al diálogo y no por la vía del conflicto”. Sigal se refirió también a la oposición del Uruguay a que el ex presidente Néstor Kirchner fuera elegido titular de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur). “Cuando no hay acuerdos nadie fuerza las cuestiones que no se pueden poner”, sostuvo, y destacó que la relación entre Uruguay y Argentina es “una relación de familia y de economías”.