El trabado conflicto por las papeleras sumó hoy un nuevo capítulo que promete aumentar la escalada de tensión entre la Argentina y Uruguay.
«Se harán verificaciones mecánicas sin fluidos y pruebas hidráulicas. Se utilizará el agua del río Uruguay, pero será retornada tal cual se extrajo», explicaron los técnicos, según consignó la agencia estatal Télam.
El anuncio de la secuencia de pruebas fue en el hotel Columbia de Montevideo.
La empresa finesa ya dijo en varias oportunidades es que la fecha de inauguración de la pastera «no pasará» del tercer trimestre del año. Ese plazo para poner la fábrica fue confirmado esta mañana por fuentes de la empresa.
«La inauguración está prevista para el tercer trimestre del año y más probablemente entre agosto y septiembre», señalaron.
La fecha no es menor para el gobierno argentino. Si todo se concreta como hoy anunciará la empresa, la pastera que desató la furia de los vecinos de Gualeguaychú, que cortan la frontera con Uruguay desde hace cuatro meses, estará funcionando antes de las elecciones presidenciales de octubre.
Las fuentes consultadas volvieron a mostrarse escépticos sobre la posibilidad de relocalizar la planta. «Se está desarrollando el final de la obra civil y la etapa de montaje. El avance está llegando al 90% la obra civil y un 50% el montaje», argumentaron.
Madrid en el horizonte. En este contexto, la expectativa de Néstor Kirchner está puesta en la posibilidad de que la «mesa de diálogo» convocada por el rey Juan Carlos para el 18 del mes próximo en Madrid sirva para lograr que Botnia retrase algo sus plazos.
El Gobierno aspira a que el humo de la chimenea de la fábrica empiece a surcar el cielo uruguayo una vez pasadas las elecciones.
Fuente: Diario La Nación
