Horas después de que el Gobierno acusara a Uruguay de «entorpecer el diálogo» y las gestiones de España en el conflicto por Botnia, el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, salió a defender la mediación del rey Juan Carlos y lanzó un duro cuestionamiento a los asambleístas que rechazan la puesta en marcha de la pastera.
Fernández instó a recomponer la relación con Uruguay y señaló que, más allá del diferido por Botnia, «hay relaciones políticas, sociales y económicas» con el país vecino que vale la pena recomponer. Enseguida destacó que el representante de la corona española, José Antonio Yáñez Barnuevo, «está haciendo el mayor esfuerzo para recuperar el vínculo que tuvieron los dos países y para que se recupere el diálogo».
Fernández se dirigió a los asambleístas de Gualeguaychú. En lo que pareció una réplica al creciente malestar de los vecinos por la inminencia del funcionamiento de Botnia, afirmó: «Esto (por la reconstrucción del vínculo bilateral) no significa que estemos cediendo posiciones, como dicen temerariamente algunos asambleístas».
Los principales referentes de la asamblea de Gualeguaychú acusan al Gobierno de haber «traicionado la lucha» contra la instalación de la fábrica de pasta de celulosa en Fray Bentos. Ven con disgusto que el Gobierno ya no hable de relocalización de la pastera y que, en cambio, esté avanzando en la confección de un «protocolo verde» para el monitoreo conjunto de su funcionamiento.
Fuente: La Nación