Portucel, tal es el nombre de la megaempresa celulósica, suscribió el martes un memorándum de entendimiento con las autoridades de la República Oriental del Uruguay, y confirmó que invertirá unos 200 millones de dólares (más de 750 millones de pesos) para instalar su pastera, otra más en ese país y también a orillas del río compartido con Argentina.
Si bien aún se desconoce en que zona será radicada la fábrica de capitales ibéricos, ya hay preocupación y alarma en la Asamblea Ambiental que sabe que deberá redoblar esfuerzos para hacerle frente a otro monstruo celulósico contaminante.
“Son estudios técnicos que atienden a lo logístico y al tema infraestructura. En este momento tenemos en nuestro poder esos estudios para ser analizados, ser ponderados y luego hacer las correcciones que estimemos necesarias”, indicó el secretario de la Presidencia del Uruguay, Miguel Ángel Toma, en declaraciones al diario El País de Montevideo.
El funcionario confirmó que el siguiente paso es firmar con Portucel el acuerdo de inversión, uno de los mayores en la historia de ese Estado. Y explicó que a diferencia de Botnia, que sólo produce pasta celulosa, la compañía portuguesa llevará el proceso hasta la fabricación de papel.
El gobierno uruguayo aclaró que Portucel comenzará su proceso de instalación en tierras charrúas “cuando se firme el contrato de inversión».
Toma consideró que es probable que la empresa de la Península Ibérica emprendiera otras iniciativas en la región, además de la que tiene con Uruguay, y aclaró que el proyecto definitivo con Uruguay «recién quedará asegurado cuando se firme el contrato de inversión, pero para ello, primero se deberán cumplir todos los pasos previos».
Para ello, resta la elaboración de un estudio previo de factibilidad que ya está en proceso, y luego la papelera estaría en condiciones de firmar el contrato definitivo de inversión.
«Próximamente, se acordará un documento que incluirá los aspectos logísticos», remarcó el al funcionario uruguayo, dijo que las empresas que quieren invertir en el vecino país lo hacen porque «confían en la Institucionalidad democrática, en su seguridad jurídica y su transparencia. Esto queda demostrado con el actual índice de inversiones existente, que ronda el 30%, sin tener en cuenta las megainversiones ya programadas».
La Asamblea apuesta al fallo de La Haya
Mientras Uruguay tiene como objetivo sembrar industrias contaminantes en su territorio, principalmente a orillas del río compartido con Argentina (Tratado vigente de por medio), la Asamblea no desconoce la futura inversión y sabe que si bien deberá redoblar esfuerzos apuesta al resultado positivo del tribunal internacional de La Haya.
En tal sentido, el ambientalista de Gualeguaychú Jorge Fritzler, se mostró confiado en ese aspecto legal favorable porque “afortunadamente está toda la documentación en La Haya bien confeccionada, como para no tener un revés”.
Tras criticar la intención del Gobierno del vecino país de permitir la instalación de más pasteras sobre el Río Uruguay, Fritzler explicó que el Asamblea tiene la información porque “el proyecto pastero del Uruguay son 7 empresas”.
“Tenemos conocimiento del permiso de Portucel para ubicarse en un lugar sobre el Río; van a ensuciar la parte de atrás de su país para mantener limpio el sector que le genera turismo”, aseveró.
En diálogo con Radio Cero, el asambleísta remarcó que “la defensa que hizo Uruguay (en el tribunal de La Haya) es bastante pobre, por lo que creemos que se pueda frenar eso, sino tendremos un grave problema porque si el fallo favorece a Botnia para trabajar, las otras se van a querer colgar detrás de la finlandesa”.
Por su parte José Pouler, otro de los referentes de la Asamblea Ambiental, afirmó que ninguna corporación maderera se va a arriesgar a instalarse en Uruguay hasta que no se conozca el fallo de La Haya.
En declaraciones a la agencia de noticias APF, dijo que los anuncios son “amenazas que desvían la atención” para fragmentar la lucha. “Dicen vamos a poner 10 plantas para que empeces a pelear contra las 10 y después pongan 5 y digan le ganamos a 5”, puntualizó.
Asamblea en Arroyo Verde
En otro orden de cosas, Jorge Fritzler informó que las reuniones de la Asamblea se realizan solamente los días domingos en Arroyo Verde, a las 15 horas al aire libre, debido a las prevenciones que se deben tomar por la Gripe A y los decretos provincial y municipal.
Y aclaró que por esta misma situación, los encuentros de los miércoles en el Club Frigorífico han sido suspendidos temporariamente.
En Uruguay aseguran que no se cae la inversión
Ante diversas versiones de prensa referidas a que la papelera portuguesa Portucel estudia invertir 1.270 millones de euros en una fábrica en Mato Grosso del Sur, en Brasil, que produciría un millón de toneladas anuales, en detrimento de su instalación en Uruguay, el gobierno fue enfático ayer en afirmar que el proyecto «continúa».
A mediados del mes pasado, medios de prensa de Brasil indicaron que Portucel abandonaba su proyecto en Uruguay y lo trasladaba a ese país, donde invertiría 1.270 millones de euros (más de 6.800 millones de pesos) en una fábrica en Mato Grosso del Sur con una producción de un millón de toneladas anuales.
Al respecto, el secretario de la Presidencia del Uruguay aclaró que la transnacional planeaba invertir en otros países de la región y de África, pero negó tener señales de que se retiraba de tierras orientales.
En tanto, el ministro de Transporte y Obras Públicas del vecino país, Víctor Rossi, dijo no tener “elementos que nos indiquen que el proyecto no siga en Uruguay, por tanto trabajamos como siempre y, si aparece una noticia, nos enteraremos formalmente».
fuente: El Día