Frente a unos siete mil estudiantes, profesores y padres procedentes de diferentes regiones de Italia aseguró que "está creciendo entre nosotros, esto es un poco exagerado lo que digo, pero lo digo para que se entienda bien, una cultura de la destrucción".
Para el máximo líder de la Iglesia católica, "Dios ha creado al hombre para construir. Nos ha dado el mundo para hacerlo crecer, nos ha dado la inteligencia para las invenciones del bien de todos. Pero no sé qué ha pasado”.
Criticó los conflictos bélicos en el mundo, los bombardeos, las torturas y la desatención de las que son víctimas los inmigrantes y refugiados.
"La llaman 'La madre de todas las bombas", dijo Francisco al cuestionar a Estados Unidos por su uso que no se compara con la misión de una madre que da vida "y esta da la muerte. ¿Estamos llamando madre a ese aparato?
El papa apostó por una sociedad basada en el diálogo, la tolerancia, la paz y la educación. Lamentó que en la actualidad en el centro del mundo está "el mal, el dinero y el poder".
