“En realidad, esta exclusión solamente arroja sombras a la credibilidad de las convicciones del gobernante que, por un lado admite un ejercicio más pleno de la democracia popular poniendo en manos de la comunidad el procedimiento de selección de jueces y, por otro lado, se reserva obcecadamente la decisión unipersonal de elegir a quienes conducirán el Poder Judicial”, expresa un comunicado.
El gremio judicial añadió que “las instituciones cristalizadas en la Constitución y en las leyes inferiores no profundizarán su contenido democrático y participativo, si no existen acciones claras y convincentes de quienes están llamados a representarlas. La sociedad, tan acostumbrada a juzgar en blanco y negro, difícilmente pueda aceptar que la creación del Consejo de la Magistratura baste como muestra de apertura a mayor democracia si a su lado persiste una muestra tan evidente de discrecionalidad”.
Más adelante, se indicó que “cristalizar en los textos legales y constitucionales el avance que el pueblo requiere para su vida democrática es tarea imprescindible aunque de suma lentitud a juzgar por los intentos fracasados. Pero consolidar una práctica integral y generosa de democratización es responsabilidad directa y exclusiva de quienes ejercen el poder del estado”.
“Las calidades profesionales, privadas, éticas, los merecimientos y las críticas que merezca el postulante, en este caso, el diputado Castrillón, deben ser medidas por la comunidad en un proceso abierto, transparente y participativo”, reclamó AJER.
“Como trabajadores judiciales hemos dicho reiteradas veces que el Consejo de la Magistratura ha sido un avance indudable, pero también hemos planteado y aquí lo reiteramos que, sin la inclusión de las vacantes en el STJ, el mecanismo siempre quedará corto y, finalmente, la democratización en el Poder Judicial incompleta”, finalizó el comunicado.
