A través de este nuevo gesto solidario de una familia entrerriana, decidido y ofrecido en una situación tan abrumadora como lo es la muerte de un ser querido, es posible que cuatro personas en lista de espera accedan a la posibilidad de trasplantarse, dos de ellas con implantes renales y dos de córneas.
La experiencia de los equipos de donación y trasplante habla a las claras de un profundo efecto beneficioso no sólo para aquellos pacientes a los que se ha favorecido con la donación, sino también para los familiares de los donantes. En efecto, y según los testimonios posteriores de las familias que, como ésta, ofrecen su ayuda en momentos tan críticos, también el núcleo familiar recibe con el paso de los días y semanas un alivio en la penosa elaboración del duelo. El haber ofrecido ayuda en medio del dolor, es un valor inestimable que la familia guardará, honrando el recuerdo de la persona amada.
Las autoridades del Cucaier en nombre de las personas trasplantadas y sus familias, expresan un profundo reconocimiento a todas las familias entrerrianas que siguen dando un elevado testimonio de solidaridad, aún desde la pérdida de un ser querido.
