Durante el acto, que se realizó en el Salón de los Gobernadores de la Casa Gris, Maulión se mostró confiado en que esta iniciativa “pueda contribuir fuertemente a la promoción de los que menos tienen, más necesitan y más sufren”. Por su parte, el titular del CEER resaltó: “Nos honra participar en esto junto a Cáritas y al gobierno, alejados de cualquier clientelismo”.
En tanto, “muy feliz” se manifestó el gobernador al mencionar que los objetivos del consorcio de gestión de microcréditos coinciden absolutamente “con las premisas que propusimos al inicio de esta gestión de gobierno: intentar junto a los sectores de la sociedad civil cambiar esta realidad que nos preocupa a todos”. Hecha esta mención, recordó que en más de una oportunidad afirmó que este gobierno no identificaba enemigos políticos, sino que su principal enemigo era la pobreza extrema que todavía subsiste en muchos sectores de la sociedad entrerriana.
“Día a día estamos trabajando en nuevas herramientas para combatirla. La pobreza extrema niega uno de los atributos más importantes del ser humano, que es la esperanza”, señaló el mandatario, no sin dejar de mencionar que otra de las premisas es que a partir de este gobierno la gestión pública toma la forma de la cooperación. “Entiendo que la cooperación es la nueva forma de la gestión pública. Es mucho más sustentable, rica y creíble, porque lo que se hace en cooperación se cuida más”.
En este marco, Urribarri dio cuenta de la importancia de promover todos aquellos planes sociales que apunten, precisamente, a gestionar proyectos para ayudar a sectores de la sociedad que toman la iniciativa de salir adelante con proyectos propios y sin depender de los subsidios del Estado.
En tanto, al dirigirse a los integrantes de las entidades civiles, Cáritas y empresarios presentes en el acto, agradeció la posibilidad que le brindan al Estado de apoyar iniciativas que tienen como fin que todos los entrerrianos puedan vivir mejor.
Políticas sustentables
El primer discurso fue del ministro de Salud y Acción Social, Angel Giano, quien hizo hincapié en que la firma del acta de constitución del Consorcio de Gestión de Microcréditos se enmarca en las pautas fijadas por el gobernador Urribarri para “combatir la pobreza y en cooperación con la sociedad civil”.
Luego destacó la importancia de trabajar en conjunto con el gobierno nacional en la economía social y también de “articular con los municipios que deseen mejorar la calidad de vida de los que menos tienen”.
“En este consorcio trataremos de llevar adelante el compromiso establecido en la Ley Nacional de Microcréditos, que implica darle la posibilidad a los pequeños emprendedores, a los que no pueden obtener créditos en los bancos”, afirmó el funcionario y agregó que también colaborarán en la elaboración de proyectos y en el armado de planes de negocios. “Ahí vamos a estar el Estado, junto con Cáritas y con el Consejo Empresario, además de otras instituciones que se puedan sumar, para construir el capital social. Esto significa generar la confianza de poder construir juntos políticas sustentables”.
A continuación, el ministro sostuvo que con el consorcio “se empieza a ver la firme decisión de la sociedad civil, a través del Consejo Empresario de Entre Ríos y de Cáritas, de acompañar al Estado en la construcción de políticas públicas, y esperamos esencialmente poder combatir con esta construcción las causas que generan la pobreza”.
Por último, Giano agradeció la confianza depositada por Cáritas y el Consejo Empresario al firmar el acta de constitución del consorcio y bregó “porque rápidamente, con los fondos que nos va a girar el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, podamos llegar a los entrerrianos que necesitan financiamiento para generar actividad económica y así cumplir con los principios básicos de la justicia social”.
Desarrollo con inclusión
Al hacer uso de la palabra, el presidente del Consejo Empresario de Entre Ríos, Atilio Benedetti, destacó “la satisfacción por participar de este acto” y resaltó que esa institución “no defiende intereses gremiales o sectoriales”, sino que trabaja para “el desarrollo equilibrado, armónico, sustentable de Entre Ríos y con inclusión”.
Tras afirmar que la participación en el consorcio les permite cumplir con los fines de la institución, dijo: “Pretendemos arrimar a través de fondos de la Nación un instrumento de inclusión, de participación, para aquellos que no pueden acceder al sistema bancarizado. Y con esto también estamos favoreciendo a los pequeños emprendedores, generando cultura y posibilitando que familias se desarrollen con dignidad”.
“Nos honra participar en esto junto a Cáritas y al gobierno, alejados de cualquier clientelismo”, continuó diciendo Benedetti y finalmente afirmó que se está empezando “un camino fructífero”.
Caridad
Otro orador fue el arzobispo de Paraná, monseñor Mario Maulión, quien recordó que la primera carta del Papa Benedicto XVI refiere a la caridad. “En el trayecto de esta carta, el Papa, además de señalar el alcance de lo que es el amor en la vida humana y en la vida de la iglesia, habla de la función de Cáritas, que es la encargada de llevar la caridad dentro y fuera de la iglesia; y menciona la colaboración que esa institución tiene que brindar a otras organizaciones que prestan servicios, para remediar problemas, promover al hombre y también acercarse e integrarse en la acción gubernamental”.
“Este consorcio que estamos haciendo con la provincia, con el Consejo Empresarial y con Cáritas forma parte de eso que el Papa nos señalaba a la iglesia”, afirmó el prelado, al tiempo que resaltó su satisfacción por participar en el acto.
Finalmente, Maulión se mostró confiado en que “esto pueda contribuir fuertemente a la promoción de los que menos tienen, más necesitan y más sufren”.
Características del consorcio de gestión de microcréditos
Los fundamentos se encuentran en el texto de la ley 26.117 de promoción del microcrédito para el desarrollo de la economía social a la que adhirió la provincia de Entre Ríos.
Esta norma tiene como objeto la promoción y regulación del microcrédito, a fin de estimular el desarrollo integral de las personas, los grupos de escasos recursos y el fortalecimiento institucional de organizaciones no lucrativas de la sociedad civil que colaboran en el cumplimiento de las políticas sociales.
El microcrédito son aquellos préstamos destinados a financiar la actividad de emprendimientos individuales o asociativos de la economía social, cuyo monto no exceda una suma equivalente a los doce salarios mínimo, vital y móvil.
Los destinatarios de los microcréditos son las personas físicas o grupos asociativos de bajos recursos, que se organicen en torno a la gestión del autoempleo, en un marco de economía social, que realicen actividades de producción de manufacturas, reinserción laboral de discapacitados o comercialización de bienes o servicios, urbanos o rurales y en unidades productivas cuyos activos totales no superen las 50 canastas básicas totales para el adulto equivalente hogar, ejemplo, cifra actualizada por el INDEC por puesto de trabajo.
Las instituciones de microcrédito son las asociaciones sin fines de lucro (asociaciones civiles, cooperativas, mutuales, fundaciones, comunidades indígenas, organizaciones gubernamentales y mixtas) que otorguen microcréditos y brinden capacitación y asistencia técnica a los emprendimientos de Economía Social
El programa de promoción del microcrédito para el desarrollo de la Economía Social tiene por objetivos: fomentar la economía social en el ámbito nacional, promover el desarrollo del microcrédito y fortalecer las instituciones que lo implementen mediante la asignación de recursos no reembolsables, préstamos, avales, asistencia técnica y capacitación; organizar el registro nacional de instituciones del microcrédito; administrar el Fondo Nacional de Promoción del Microcrédito, que se crea en la ley 26.117, y promover la obtención de recursos públicos y privados.
También se apunta a implementar estudios de impacto e investigación de la economía social, generando un sistema de información útil para la toma de decisiones; y a promover acciones a favor del desarrollo de la calidad y cultura productiva que contribuyan a la sustentabilidad de los emprendimientos de la economía social.
