En diálogo con el diario Cambio de Salto, Layes explicó que el número aumentó considerablemente porque se sumaron los ex trabajadores que cumplieron tareas en empresas subcontratadas. Admitiendo que cuando comenzaron a juntar firmas por el mes de mayo “pensamos que la convocatoria iba a llevar unos 500 u 800 obreros, y resulta que (en poco tiempo) ya había unas 1.700 personas. Durante estos días no hemos podido finalizar porque todos los días aparece un compañero que no ha podido firmar y lo está haciendo ahora”.
En total hasta la fecha “se van juntando alrededor de unas dos mil trescientas personas ya que el reclamo no surge exclusivamente de la empresa constructora Salto Grande, sino que están otros obreros uruguayos que trabajaron en otras empresas relacionadas con la represa como Stiler (construyó los centros de frontera y la subestación), GM Instalaciones (montaje electromecánico), la gente de Alvaro Palenga (construcción barrio Dos Naciones), la gente de Carcabá o Sassem (construcción del Barrio San Martín) que al igual que nosotros, no cobraron despido ni los otros beneficios”.
El primer planteo de este tipo fue realizado a finales de la década del 70, pero el planteo no prosperó en la justicia de la dictadura uruguaya. Aunque “por esa misma época, un abogada de mercedes logro cobrarle al Estado los beneficios para los obreros de la construcción del puente Fray Bentos – Puerto Unzué”. Otra obra internacional que une al Uruguay con Argentina.
Si bien el planteo se retomó con el advenimiento de la democracia en el vecino país, “el expediente murió en el juzgado sin que nadie hubiera tomado parte en el asunto”.
Sueldos y aportes
Ruben Layes subrayó que trabajando en la construcción de la represa de Salto Grande y obras anexas se ganaban excelentes sueldos. Ejemplificando con que, “en mi caso, dejé de trabajar como maestro, entré en seguridad de la represa y pasé a ganar en el primer mes el triple”.
Pero como remarcó que “llegamos a ser 3.500 obreros uruguayos que dedicábamos nuestro tiempo exclusivamente a eso, abandonando a la familia. Se ganaba bien pero no se nos compensó el sacrificio paralelo. El reclamo se va a hacer por la vía administrativa y esperamos tener suerte, porque los abogados pretenden englobar todo para ver si se lograr”.
Con respectos a los aportes realizados a través de los correspondientes descuentos, Layes subrayó el trabajo que en su momento realizó la diputada por Salto, Alba Cocco. “A ella se le planteó este tema y se puso a disposición nuestra. Recogió datos y manifestó que todos los aportes nos corresponden. La empresa Constructora Salto Grande y todas las empresas subcontratadas tenían que los aportes de los sueldos eran reintegrados por la CTM a las respectivas empresas, los sueldos. Y las cargas sociales eran aportadas en forma directa por la comisión a través de Rentas Generales, lo que en su momento se llamaba Dirección Nacional de Seguridad Social y UREFI. Los aportes, entonces, se hicieron a través del Estado. Esto trajo aparejado que se sabía que los aportes fueron hechos en tiempo y forma, pero ese dinero fue derivado a otra cosa”.
Layes agregó que “CTM tiene documentación que acredita eso, porque es mucha plata”.
El integrante de la Comisión Coordinadora de los ex obreros de Salto Grande, admitió por último que ante este planteo a la CTM “no sabemos que va a ocurrir y tampoco podemos crearle falsas expectativas a la gente diciéndole que va a cobrar esto o lo otro”.
