En la audiencia que se realizó ayer, el Juez de Garantías hizo lugar a un pedido que realizó el defensor Pablo Ronconi para que se le efectúe un informe preliminar para determinar si las condiciones de alojamiento en la Jefatura de policía son aptas para un hombre de su condición.
Sack arrastra desde hace muchos años problemas psiquiátricos y en un informe psicológico realizado una década atrás para otras causas penales que lo tuvieron como protagonista, se señaló que es un hombre inimputable. Pero desde que está encerrado en el penal de la Jefatura de Policía ha sido compensado, fue llevado al Hospital Centenario e incluso atendido por profesionales que le habrían mejorado la medicación. A pesar de todo, será evaluado para determinar si psicológicamente está en condiciones de permanecer encerrado.
Por lo pronto, la semana entrante se estará fijando una fecha para la realización de una pericia psicológica psiquiátrica con un tribunal interdisciplinario que podría conformarse hoy, que tiene como fin establecer si Sack mantiene su condición de inimputable que le fue diagnosticada años atrás.
Cuando se lo detuvo a Sack, a tres cuadras del lugar del crimen, fue examinado por el médico Marcelo Benetti, que lo encontró orientado en tiempo y lugar, pero por sus antecedentes se recomendó la práctica de la pericia psicológica psiquiátrica.
Mientras todo esto continúa por los caminos legales, desde la fiscalía se deberá trabajar rápidamente para acortar los plazos y obtener los resultados de otras pericias que también son claves en la investigación. Una prueba que resultará crucial es el estudio microscópico de los pelos que tenía la víctima debajo de sus uñas, que será comparado con el detenido y el de los otros dos hombres que fueron detenidos en los allanamientos realizados el domingo y liberados pocas horas después.
Fernández tenía 47 años y desde hacía un largo tiempo vivía en el domicilio donde fue asesinado. Con Sack tenían relación, e incluso compartían encuentros en la esquina de la casa, donde ambos bebían sentados en un tronco.
Aunque no está precisado qué fue lo que ocurrió el sábado por la tarde, se estableció que Fernández conocía a su victimario porque no había señales de puertas forzadas en la casa. Por testimonios de vecinos, se llegó rápido al nombre de Sack, que fue detenido en Guido Spano y Soldado Mosto.
