Relató que llegó a «vomitar espuma»; que sintió «una gran picazón en todo el cuerpo», y que tras perder el conocimiento, despertó en una ambulancia cuando lo estaban lavando con suero.
Quinteros comentó, además, que este miércoles “cuando fui al baño empecé a largar mucha sangre y fui al médico a hacerme estudios, pero recién mañana me van a dar los resultados”.
También dijo que, debido a que lleva tres semanas con serios problemas de salud, planteó a los médicos su intención de hacerse atender en Buenos Aires, pero lo convencieron de que se siguiera tratando en el Uruguay «para no meterse en problemas políticos». Igualmente, señaló que no tiene temor porque el trabajo en la pastera “es una changa” y debe “pedir plata prestada” para atenderse.
“Mis compañeros están todos preocupados. Pero la gente de Botnia no me fue a ver nunca, ni me hicieron estudios médicos”, aseguró Quinteros.
