En declaraciones que se conocieron esta mañana, la directora de Educación de Gestión Privada del CGE, Patricia Todoni, dijo que se reunió –como estaba previsto– con el equipo directivo y el apoderado legal del instituto, quienes le informaron que “el alumno no fue expulsado de la institución y continuó asistiendo a la escuela hasta que el papá lo retiró”, ya que “basándose en el acuerdo de convivencia y del ideario de la institución se pidió el pase del chico a otra escuela”.
Muy molesta luego de enterarse por los medios digitales de lo informado por el Instituto al CGE, Cogno dijo que las autoridades del colegio “evidentemente mienten”, y explicó: “Pedirnos que en una semana lo cambiáramos de institución es una expulsión. Dicen que no fue expulsado, eso es una mentira y a nosotros nos duele la mentira”.
“Yo les pido una retractación de la mentira. Si tienen que dar un paso al costado los que lo tengan que dar, que lo den. A esto lo buscan justificar de alguna manera, y en vez de retractarse empeoran las cosas”, manifestó.
“Nosotros somos padres que estamos diciendo la verdad. Si el chico no hubiera sido expulsado, no habríamos hecho ningún problema. El pedido de pase fue una expulsión, lo retiramos porque no podía seguir entrando a la escuela. Sigo ratificando lo que declaré y pido verdad como madre”, insistió la mujer.
Esta mañana, Todoni había dicho a la agencia APF: “El equipo directivo y el apoderado legal nos confirmaron que el chico no fue expulsado y que continuó asistiendo a clase hasta que fue retirado por su padre”.
Ante la pregunta sobre la actual situación del chico, Todoni indicó: “Según sabemos ya está ubicado en otra institución”, al tiempo que explicó que “el seguimiento no se planteó debido a que no se produjo la expulsión, por lo que el pase es una cuestión de partes que no implica la intervención del Consejo”.
Por su parte, la titular del CGE, Graciela Bar dijo “No puedo ir contra los cánones de la Iglesia, tengo que ser respetuosa”. Añadió “Cada escuela tiene autonomía para diseñar su acuerdo institucional –añadió—. En esos acuerdos se establecen las pautas de disciplina y de convivencia, y son conocidos por parte de los padres, quienes los aceptan. Si en esa escuela estaba prohibido hacer circular preservativos, los padres estaban al tanto de eso”.