Di Lello habló sobre acuerdos de convivencia transgredidos y “medidas superadoras” para corregir esas faltas. “Hay que encarrilar y redireccionar estas conductas”, explicó. Por ello, dejó trascender la posibilidad de realizar un abordaje domiciliario. Pero aclaró que primero es la Justicia la que debe actuar. Además dijo que a las escuelas las rodean un contexto de “violencia terrible”.
Más adelante, dijo que el chico tiene “muy buenas notas”. Por ello, sostuvo que “sería una picardía dejar en el camino la trayectoria de un adolescente de 14 años y condenarlo”, pero por otra parte, hay “500 familias preocupadas y con justa razón”. El tutor del chico al que se le escapó el disparo es el abuelo dado que el padre no está presente en la familia y la madre falleció. Además dijo que viven en una condición social “muy humilde” y necesitan “apoyo y acompañamiento”.
“Yo quiero destacar que hasta recién estuve reunida trabajando con el rector y con la vicerrectora seguimos trabajando en el Colegio nacional. Recién termino la reunión y destacaba como actuó la escuela. Actuó como se debe actuar un director y un equipo de conducción. Lo primero que hay que hacer es no entrar en pánico y así lo hicieron. El profesor Marturet fue impecable, reaccionó con los primero auxilios al chico accidentado y tomó intervención con los demás actuantes llamando a la Justicia y al Copnaf”, dijo la responsable de la Dirección Departamental de Escuelas.
“Hizo todo el protocolo y transmitió a la escuela mucha tranquilidad y contención”, añadió. Di Lello dijo que al llegar observó mucha serenidad. “Cada cosa en su lugar. La escuela no se paralizó nunca; siguió andando y, a la vez, abordando lo que les estaba pasando que era terrible. Esto me indica a mí que estamos frente a una escuela que estaba organizada. Que alguna vez se planteó la posibilidad de estos hechos y ya lo tenían trabajado como abordar una emergencia”, destacó Di Lello.
Por último, destacó que están trabajando en el abordaje del caso con un equipo interdisciplinario, que incluye psicólogos. “Ahora me voy a comunicar con Desarrollo Social para buscar los instrumentos para atender al chico que se accidentó, a los que participaron, al que se le ocurrió llevar el arma y al resto total de la comunidad”, dijo Di Lello.
Por su parte, Schierloh dijo que “los chicos son amigos, tienen muy buena relación. Aparentemente fue a exhibir el arma dentro del baño y el error de manipularla además de llevarla a un centro educativo, más teniendo presente que son chicos de corta edad”. “En el hospital Masvernat se constató que era una herida de arma de fuego con orificio de entrada sin salida. Son lesiones de carácter leves”, dijo Schierloh.
“Ahondando en detalles se pudo establecer, de acuerdo a lo aportado por algunos chicos, personal directivo y algunos docentes, el suceso habría acontecido en el interior del baño. Había una persona de 13 años que resultó lesionada y un chico de 14 que aparentemente estaba manipulando un arma de fuego, la estaba exhibiendo y en esta manipulación se le escapó un disparo”, sostuvo.
El menor que tenía el arma, quien aparentemente la trajo desde su domicilio, fue trasladado a la Comisaría del Menor y se dio intervención al Copnaf. Además esa repartición intervino por el otro menor de 14 años tenía en sus bolsillos cinco proyectiles calibre 22 que pertenecerían al arma mencionada.
“Tomó intervención el Juzgado de Menores para saber la procedencia del arma y los motivos por los cuales la había transportado hasta el centro educativo”, recalcó Schierloh.