A la barrera no se le colocaron los brazos debido a que los trenes no pueden cruzar cuando las mismas están levantadas. “Una barrera, sin personal, al estar levantada, el maquinista tiene que parar, no puede pasar”, indicó. “Únicamente cruza con los brazos arriba cuando hay un desperfecto pero el personal está haciendo de banderillero, cortando el paso de los vehículos”, acotó.
La falta de banderilleros es “crítica” en esa zona dado que es uno de los ingresos a la ciudad desde el norte y cada vez es más transitado. “Estamos tomando los recaudos para, aunque sea, colocar en un primer momento banderilleros y luego guardabarreras. Estamos viendo de que forma cubrimos la barrera de Concejal Veiga si pagando horas extras al personal hasta que se tome personal nuevo”, manifestó.
El martes de la semana pasada un tren de cargas chocó contra un colectivo en el paso a nivel a la altura de calle Concejal Veiga. El tren se dirigía a Paso de los Libres y colisionó la parte trasera de un colectivo Mercedes Benz 114 blanco que venía en dirección norte-sur. Dos personas recibieron heridas leves y fueron trasladadas al hospital Masvernat. El chofer, de 52 años, resultó ileso.
La ausencia de barreras y banderilleros se repite en los pasos a nivel de Salto Uruguayo, Chabrillón y Gerardo Yoya. En esas intersecciones hay cruces de San Andrés y señales fono luminosas. “Debido al gran tránsito en los mismos convendrían la colocación de barreras o banderilleros”, manifestó el concejal del FPV.
Hace poco tiempo, el ramal ex Urquiza cambió de manos, pasando de ALL (Amércia Latina Logística) al Belgrano Cargas. Vale decir, dejó de ser privado y ahora volvió a estar en manos del Estado. Pezzarini indicó que la solución al déficit de personal es un tema que llevará tiempo. “Todo lleva su tiempo”, argumentó.
En ese sentido, indicó que el proceso inverso, cuando se privatizó a principio de la década del 90, le demandó seis meses a la empresa privada (en ese momento Pescarmona) hacerse cargo del ferrocarril. “Y esto va a llevar un tiempo prudencial”, indicó.
En este momento, el cuerpo de guardabarreras está compuesto por 20 personas. Y están a cargo de los cruces de varias calles: Vélez Sarfield, Scattini, Roque Sáenz Peña, Salta, San Lorenzo y Tavella. “Están divididos en tres turnos de ocho horas cada uno más los relevantes”, manifestó. Pezzarini estimó que falta nombrar a 14 personas que se encarguen de esos cruces para cubrir todos los pasos a nivel.
El déficit de personal se repite en la sección de Vía y Obra y en los talleres. En Vía y Obra se requiere una cuadrilla de 12 personas para trabajar en las vías. “En este momento hay una cuadrilla de once personas. Tenés uno que está cortando el pasto, otro que está en señales y otros dos que andan en las zorras patrullando y el resto está trabajando en vías”, dijo.
En el taller hay 48 personas trabajando y Pezzarini estimó que se necesita sumar a una veintena de obreros “para salir del paso”. “Faltan varias personas porque se van jubilando y otros lamentablemente tuvimos fallecimientos y otros que están enfermos y ya no van a volver a la actividad con enfermedad prolongada. Se nos va cayendo el numeral”, señaló.