“Lo que sostengo es que realmente el ente no mejora la recaudación y si la municipalidad no lo asiste financieramente, es muy probable que pueda entrar en cesación de pagos”, advirtió. Pero, a renglón seguido, dijo que no creía firmemente en esa posibilidad porque la municipalidad seguramente seguirá asistiendo para abonar los sueldos de los empleados y los insumos de los proveedores.
El presupuesto 2009 contemplaba un déficit de $ 1.500.000. “Yo creo que va a terminar el año con más de $ 4.000.000 financiados por la municipalidad porque la recaudación del ente no alcanza”, estimó el edil.
El edil, que aseguró que dejó los papeles sobre el escritorio y se retiró antes de la sesión por problemas personales, dijo que solicitó a las autoridades del Ente que “por lo menos intente morigerar el financiamiento externo”. Para ello, se requiere aumentar los ingresos. “¿Cómo se aumentan los ingresos? Disminuyendo el nivel de morosidad”, se respondió a si mismo.
En algunos sectores de la ciudad, la morosidad en el sistema de medidores ronda el 65 %. Y en otras desciende ese porcentaje aunque nunca por debajo del umbral del 50 %. A Santana le llamó la atención ese porcentaje en lo usuarios de un sistema diseñado para evitar el derroche y que se puede cortar de manera más simple.
La morosidad en el sistema de avalúo llega en algunos sectores hasta el 70 %. “Es increíble. Ninguna empresa es viable con este nivel de morosidad”, dijo el edil quien situó como lógico un déficit que no supere el 25 % de los usuarios. ”Esto se puede revertir con un seguimiento de los usuarios que no pagan y una intimación”, explicó.
El edil se asombró de que en la carpeta se incluyan no sólo los cálculos de los recursos adicionales que se van a obtener con la nueva facturación sino que sistemáticamente se admita niveles de morosidad tales como el 83 % en la zona 4 de la ciudad y 55 % en la zona 3 %. “En la zona 1, 43 % y estamos hablando de una zona céntrica. Es inadmisible”, argumentó.
Por último, sostuvo que aún falta para que se aplique el aumento dado que regirá a partir del 4º bimestre y recién está venciendo el 3º trimestre. Y explicó, desde su criterio, la diferencia con otros concejales que transitaron anteriormente por el recinto. “A diferencia de lo que hacían en el pasado quienes hacía oposición y que nunca pudieron proponer nada. ¿Cuál es mi pensamiento? Que si se va a hacer un rol de oposición o de crítica, también se debe proponer”, alegó. “Si no se propone nada o se echa la culpa a los demás nunca vamos a avanzar”, manifestó Santana.
