De aprobarse la norma, se adhiere en el régimen de licencia y vacaciones de los agentes locales la posibilidad de solicitar una licencia en caso de vivenciar por su condición de género violencia física, económica y/o psicológica para las trabajadoras de la Municipalidad y también pone al Estado local como un actor en la solución del problema. Sáenz remarcó que “demasiadas veces las instituciones libran a las mujeres a su suerte, no teniendo políticas de protección que colaboren con el bienestar de la mujer”.
La necesidad de desarrollar normativas y prácticas que integren la perspectiva de género y rechacen la violencia es prioridad, no sólo por la inminencia de la convocatoria nacional “#NiUnaMenos” sino también porque día a día esta problemática se lleva vidas. Consciente de esto, la concejala afirmó: “Proponemos hoy una medida sabiendo que no es lo único ni suficiente, pero lo hacemos con la intención de avanzar en el camino de la profundización de la igualdad de género.”
