El Campo Sioinista señaló en un comunicado: Es "una mañana difícil para todos nosotros y aquellos que creyeron en nuestra visión". No obstante, agregan que seguirán "luchando en nombre de los ciudadanos de Israel por la justicia social, la igualdad y la democracia".
El partido de Netanyahu, el Likud, es la fuerza más votada (a pesar de que las encuestas la situaban segunda). Sin embargo la formación de gobierno no resultará fácil, pues para formar gobierno Netanyahu tendrá que contar con el apoyo de varias formaciones diversas".
"La llave la tiene Moshe Kahlon del partido Kulanu y Avigdor Lieberman de Israel Beitenu (Nuestra Casa Israel)", dijo Mark Heller, experto del Instituto de Estudios de Seguridad Nacional, en Herzliya. "Y ambos no se llevan bien con Netanyahu", agrega. Kulanu es un nuevo partido que lidera un exmiembro del Likud y que sobre todo apuesta por la liberalización económica.
Además de un gobierno de fuerzas de derecha, el Likud también podría acabar recurriendo al Campo Sionista para formar una gran coalición, una solución que había propuesto el propio presidente del país, Reuven Rivlin. Pero ya antes de los comicios la descartaron tanto Netanyahu como Herzog.
La cuarta fuerza en fotos es el Partido del Futuro de Yair Lapid con 11 escaños. El partido Kulanu obtuvo 10. El Partido de los Colonos, 8, seguido de dos formaciones de ultraortodoxos con 7 y 6 escaños.
El ministro del Exterior, Avigdor Lieberman, consiguió 6 escaños con su formación Nuestra Casa Israel, mientras que Merez, de izquierdas, obtuvo cuatro escaños. El presidente de Merez, Sehava Galon, anunció su dimisión si el partido sólo obtiene finalmente cuatro escaños.
