LA CAUSA, BREVE RESEÑA…
La fundación creada hace más de 5 décadas por más una decena de notables apellidos concordienses, entre ellos, Ildarraz (ya fallecido) y Federico Scharn (único fundador vivo), que tenía como fin la noble idea de crear un hospital para enfermos mentales. A cambio de ese hospital que nunca se hizo, los actuales directivos alquilaron una vivienda para ese fin.
Lo que se denunció fue una supuesta estafa que el fiscal Zabaleta investiga como una supuesta acción fraudulenta encuadrada en el artículo 173 inciso 7° del Código Penal contra por lo menos dos integrantes del directorio de la “Fundación Ayuda psico-somática San Antonio de la Concordia”, Jorge Robinson (h) y Mario Siebzehner (ampliada luego a sus respectivas esposas). Se asegura que existen otros personajes comprometidos.
QUERELLANTE : EL ESCRITO…
El escrito de la querella al que accedió DIARIOJUNIO apunta contra Robinson y Siebzehner quienes “actuaron para obtener un lucro indebido”. Señala también que Robinson “se ha rodeado de personas pertenecientes a su núcleo íntimo y de su manejo personal con el único propósito de debilitar la efectividad de los controles… a fin de concretar su plan defraudatorio”. Agrega como dato que “impidió la participación en la fundación de personas que pretendían cumplir con el objetivo de la misma”.
La querella también habla de un “beneficio indebido” a favor de Alfredo Martín Arigós a quien le transfirieron en el predio del Naranjal, un terreno de casi 6.500 mts2 donde, según la querella, “se falsea la causa expresada para justificar la transferencia de un terreno… que sin dudas el valor del lote es exorbitante”.
Otros profesionales intervinientes e investigados son la escribana María Delfina de Santiago Mac Donald, el contador Miguel Afranchino y el agrimensor que subdividió los lotes.
Siempre según este escrito pese a que la Fundación no tenía problemas financieros ni necesidades básicas de urgencia, ni proyecto para llevar adelante el objeto de la Fundación, se desprendieron del patrimonio “bienes raíces por precios absurdos, lo que justifica la sospecha de que recibieron de parte de los compradores dinero para incumplir con los deberes”. Así ofrecen un listado de más de 20 compradores a los que también se investiga por esa compra a precio vil.
Es que, según las estimaciones de la querella, esos terrenos tienen un valor de mercado de alrededor de 70 dólares el metro cuadrado y aparecen comprándolos a un precio exageradamente menor que oscila entre los 10 y los 16 dólares. Entre los involucrados aparecen dueños y directivos de una importante empresa de Concordia ligada a electrodomésticos y al financiamiento a través de cartones de crédito y a un empresario ligado a una distribuidora de alimentos.
El escrito señala textual que “no es posible descartar la participación delictiva de los restantes miembros del Consejo de Administración de la Fundación ; ni de los beneficiarios de las transacciones judiciales ; de la dación en pago de honorarios denunciada y de las ventas de lotes contra todos los cuales me reservo el derecho a ejercer esta querella”.