En el municipio hay 200 empleados que no cobran casi nada: cero, uno o dos pesos. Mientras que existe otro grupo de 200 trabajadores a los que se les descuenta un alto porcentaje del sueldo sin llegar a los casos extremos mencionados anteriormente. En definitiva, se trata de 400 empleados a los que se les dará la posibilidad de salir del endeudamiento permanente, según fuentes de la Secretaría de Hacienda.
Para el Ejecutivo, el problema radica en que hay demasiadas mutuales prestando al mismo tiempo. En el listado se encuentra la Mutual de Ayuda Social, Obras Sanitarias, UOEMC, ATE, entre otras además de la Caja Mixta y Sidecreer. Algunas a tasas que rondan el 40 % mensual, según fuentes de Hacienda. En consecuencia, se deduce que los empleados son “rehenes” de esa situación.
En consecuencia, el Concejo decidió suspender por tres meses los códigos de descuento. ¿Qué implicancia tiene la suspensión? Durante enero, febrero y marzo, las mutuales y los gremios no pueden dar nuevos préstamos. En cambio, pueden descontar a los empleados los créditos acordados antes de fin de año.
La ordenanza creó una comisión que va a estudiar la formulación de un reglamento. De esa forma, se procurará regular la tasa de interés con un tope similar al que estableció el gobierno de Cristina Kirchner en 2011. El número debe ser propuesto por la comisión y luego el intendente deberá decidir su aplicación mediante un decreto. Además las autoridades no quieren que los empleados puedan sacar préstamos en todas las mutuales existentes sino que puedan solicitar a dos como máximo. Es que entienden que no sólo los trabajadores ven comprometidas sus finanzas por las tasas de interés sino que además deben afiliarse a las mutuales pagando una cuota gremial y una adicional correspondiente a la mutual de ese gremio.
El otro problema es el porcentaje máximo de descuento que podrán aplicar. La intención es que entre el 20 o el 30 % del sueldo neto no pueda ser alcanzado por ningún descuento. Muchos empleados de por sí tienen descuentos judiciales por cuota alimentaria o voluntarios por adherir a un seguro de vida. Si a eso se añade las deducciones de las mutuales, cuando van al cajero no tienen saldo disponible.
“Estamos analizando todo en base a ver como es la tasa. Hay que analizar bien para que quede algo coherente”, dijo la subsecretaria de Hacienda, Mónica Lifschitz quien integra la comisión junto al ex concejal Marcos Wdowiak, asesor legal, y María Eugenia Tassino, la directora de Recursos Humanos. “Lo que vamos a hacer estudiar todo y vamos a sugerir al Ejecutivo una propuesta de todo esto. La idea no es eliminarlas sino establecer ciertas reglas de juego, parámetros y límites. Un empleado no puede tener nueve mutuales. Un empleado no puede estar pagando nueve cuotas a las mutuales, más los préstamos. Es inviable. Muchas de esas cosas son las que se tienen que definir”, indicó Lifschitz.
Para paliar la situación de los 400 empleados que no tienen dinero dado que tienen casi todo su sueldo embargado, la Caja Mixta les ofrecerá la posibilidad de obtener préstamos sin interés. El único cargo adicional que tendrán son los descuentos que la Caja realiza en concepto de gastos administrativos. Es una solución transitoria hasta que las mutuales comiencen a prestar nuevamente pero con las nuevas reglas de funcionamiento.
En Hacienda entienden que al estar regulada la tasa, van a tener que competir las mutuales entre sí para captar a los afiliados. A largo plazo, la idea es que aquellas que no tengan sus cuentas en orden, acostumbradas a trabajar con un margen de ganancia excesivo, dejen de funcionar. De esa forma se beneficiarán los empleados dado que obtendrán créditos baratos y no se verán envueltos nuevamente en compromisos financieros onerosos.
‘Queremos que se revea esta ordenanza’
“El Concejo aprobó una ordenanza en la cual los afiliados de las diferentes mutuales no van a poder hacer uso de esas mutuales y hay un problema porque los compañeros se les han hecho descuentos en todas las mutuales y se encuentran con que las mutuales no les pueden prestar servicios”, indicó Rapuzzi.
El miércoles, la UOEMC (Unión de Obreros y Empleados Municipales de Concordia) hizo una presentación al intendente Enrique Cresto solicitando que se revea la medida. Ese día hubo una reunión en el cuerpo de delegados de la UOEMC y decidieron llevar el petitorio para consensuar una ordenanza que “no perjudique tanto a los mutualizados como está pasando. Hay gente que cobra $ 0 y con esto se ve perjudicado”.
“Acá llegan las quejas de los afiliados nuestros y de diferentes mutuales planteándonos que es lo que podemos hacer. Queremos que se revea esta ordenanza. A los mutualizados se les ha hecho los descuentos correspondientes pero las mutuales no pueden operar por tres meses”, indicó. Hasta marzo no pueden operar. Rapuzzi dijo que se debe confeccionar otra ordenanza donde se especifique cual es el tope de descuentos que se puede aplicar. “Lo que planteamos es que hay gente que tiene cierto porcentaje del sueldo ocupado con las mutuales y este mes que es un mes largo, difícil, los compañeros no van a tener la posibilidad de poder acceder a una orden para retirar de una proveeduría o de alguna farmacia”, señaló.
Rapuzzi dijo que la ordenanza que se sancione en el futuro debe ser consensuada con los trabajadores mutualizados y los gremios. “Al momento en que se realice la ordenanza definitiva para ver cuáles son los porcentajes a descontar por las mutuales, que los trabajadores también tengan participación”, dijo.
En Hacienda descuentan que los gremios participarán de las reuniones de la comisión dado que el intendente no tiene inconvenientes en que asistan. Serán invitados aunque no forman parte de la misma dado que no fueron incluidos cuando ésta fue creada.
El gremialista indicó que se mencionó la posibilidad de establecer un descuento de un 40 % como límite a los descuentos. “Es un tema vidrioso porque si bien hay casos en que los compañeros cobran nada más que las asignaciones familiares pero cada trabajador es responsable de sus actos y si quieren operar con las mutuales, tienen que tener la libertad de poder operar”, recalcó.
“No se puede haber tomado la decisión que se tomó dejando sin ese servicio a los trabajadores. Hay gente que se acostumbra a cobrar las asignaciones familiares y acostumbran a vivir de las mutuales. Hoy eso no lo pueden hacer”, indicó.
Rapuzzi dijo que hay mutuales que funcionan muy bien dado que no sólo ofrecen servicios de proveeduría sino que también “organizan viajes”. En su caso personal, dijo que cuando en la provincia circulaban los bonos federales, con la mutual pudo “subsistir” a pesar de que durante la intendencia de Hernán Orduna se les descontaba a los empleados pero no se pagaba a las mutuales, según atestiguó. A pesar de ello, las mismas siguieron funcionando. “Eso es lo que nos hace pensar que en algunos casos las mutuales cumplen un rol importante”, recalcó.