Un tiempo que se abrió el 25 de mayo de 2003, con la presidencia de Néstor Kirchner y que se continúa con el actual gobierno de Cristina Fernández; un tiempo que adviene en el marco de un proyecto político que pugna por levantar las banderas de los grandes movimientos nacionales y populares que jalonaron nuestra historia; un proyecto que hace propios -desde la práctica- los principios de justicia social, independencia económica y soberanía política, principios tan caros al peronismo, tantas veces declamados y tantas otras, traicionados en su nombre; un proyecto que no escatima esfuerzos ni corre el cuerpo en la batalla por más y mejores derechos para todos y todas; un proyecto que ha sabido recoger las luchas y reivindicaciones sostenidas por amplios sectores de nuestro pueblo para transformarlas en realizaciones; transitamos así un tiempo de luchas, de avances y de esperanzas que cimienta sus bases sobre hechos concretos, como lo son:
– La renovación de la Corte Suprema de Justicia con la incorporación de figuras de capacidad y conducta incontrovertible.
– La reconversión de una economía de especulación por un modelo productivo que permitió una importante disminución de la desocupación y la pobreza.
– La derogación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, y los indultos presidenciales, propiciando la reapertura de los juicios contra los genocidas de la última dictadura militar.
– El desendeudamiento externo, logrando una quita de más de 70.000 millones de dólares.
– La instrumentación de una política exterior volcada a Latinoamérica, materializada en la clausura del ALCA para la región y la construcción de la Unasur.
– La sanción de la Ley de Financiamiento Educativo, llevando la inversión en educación del 1,2% al 6% del PBI. Sanción de la Ley de Educación Técnica, construcción de 1.000 escuelas y lanzamiento del programa “Conectar Igualdad”, mediante se prevé la entrega de 3.000.000 de netbooks.
– La re estatización de las AFJP, la incorporación de 1.800.000 nuevos jubilados al sistema previsional y la sanción de la Ley de Movilidad Jubilatoria
– La sanción de la Ley de Servicios Comunicación Audiovisual, entendiendo a la comunicación como un servicio y no como una mercancía.
– El establecimiento de la Asignación Universal por Hijo que llega a más de 3.500.000 menores de 18 años.
– La creación desde 2003 a la fecha de más de 4.000.000 de puestos de trabajo, logrando así una reducción efectiva del desempleo del 25% al 7,5%.
– La sanción de la Ley de Matrimonio Igualitario.
Como jóvenes somos conscientes de la trascendencia de estas y otras medidas, de las conquistas alcanzadas y de aquello que todavía sigue faltando; pero sobre todo tenemos en claro que aquello que falta lograr solo habrá de concretarse en el marco de la continuidad de este modelo económico, político, social y cultural que actualmente encabeza nuestra presidenta quien ha dado sobradas muestras de su voluntad y capacidad para llevar a la práctica sus convicciones políticas en beneficio de las mayorías populares; un proyecto de realizaciones que, con la gestión del gobernador Sergio Urribarri, encuentra su reflejo en nuestra provincia.
Desde estas certezas, también tenemos en claro que nada podemos esperar de aquellos que con su accionar y sus omisiones nos hundieron, como Nación y como pueblo, en una larga y oscura historia de frustraciones y dolor.
Por todo esto y entendiendo la importancia de lo que está en juego en este año que comienza, desde la Juventud de Militancia Peronista asumimos el compromiso de redoblar nuestro esfuerzo militante y convocamos a todos los jóvenes a sumarse a esta tarea que significa la construcción definitiva de una Patria para todos y todas.