EL AHORRO
El autor de esta nota consultó al ministro cuál fue el volumen del gasto en medicamentos durante el año 2016 y fue en números redondos de 450 millones de pesos. Si a esa cifra le incorporamos el 40 % de inflación nos daría un número de 180 millones que, sumados a los 450 millones nos remite a un total de 630 millones.
Aunque De la Rosa manifestó que ahorrarían 100 millones, el pliego habla de 600 millones o sea apenas 30 millones menos que el año anterior. No pareciera un número tan significativo, (apenas el 5 %), que amerite una movida como esta.
Más aún, De la Rosa habló de corrupción en el anterior sistema, la calificó de “grosera” y de abultados sobreprecios en varios medicamentos que ocasionaron un gran perjuicio económico a la provincia. Se lo consultò sobre datos concretos al respecto y respondió que en no los tenía en ese momento.
Como premisa general podría decirse que las afirmaciones del ministro no serían novedad, ni en ese rubro ni en otros, sin embargo lanzado al boleo sin más que los dichos puede sonar en cualquier oído como una simple difamación para salir del paso con una expresión que en este país está de moda : la corrupción.
En otras palabras, el ministro debería esmerarse más, proporcionar a la opinión pública datos ciertos y comprobables, si quiere que ese argumento sustente sus dichos.
LA ONDA LIBERAL
El otro tema que hizo ruido, tanto al Tribunal de Cuentas como a los afectados, es el especial interés en dejar fuera de juego a pequeñas y medianas droguerías y laboratorios de Entre Ríos.
Aunque el ministro negó que fuera así, los hechos lo desmienten. Ninguna empresa en esta provincia tiene ventas por 300.000.000.- o un patrimonio de 40 millones.
Todo pareciera indicar que dirigen la compra a multinacionales en detrimento del esfuerzo local. Igual hay que decir que, este no sería un argumento válido por sí solo. Lo sería si De la Rosa demostrara una ventaja económica considerable (ya explicamos que de acuerdo a los números, no los dichos, está en duda), que en el actual, se han aprovechado corruptamente del Estado y otros elementos verosímiles y contundentes que den razones.
Para colmo, ya comienza a sospecharse de esa onda nacional macrista contra la industria nacional o las PyMES a las que viene destruyendo sistemáticamente en favor de importaciones o de multinacionales, siempre con el argumento de favorecer a los argentinos que “pueden comprar màs barato”.
Pero a pesar de estos argumentos que pueden ser tachados por un liberal u otra persona que valore el tema del precio como fundamental, el Tribunal de Cuentas ya mencionó que no es bueno en ningún caso estrechar la posibilidad de competencia.
Lo dijo así según lo difundió este diario “promover la concurrencia del mayor números de ofertas”, así se consigue mejor precio, o sea “eficiencia”. Además, plantea la necesidad de parte del Estado de “proveer a la defensa de la competencia”.
Es decir que en este proyecto de pliego ni siquiera se es consecuente con el liberalismo. Por si faltara, el pliego exige a los oferentes propuestas totales de material biomédico y medicamentos impidiendo que realice o formule propuestas parciales “atentando dice, con el principio básico de concurrencia”.
SOBREVUELA LA CORRUPCIÒN O EL TRAJE A MEDIDA
Es probable que la denuncia de Bahler haya sido temeraria como la calificó De la Rosa quien además la calificó en una nota enviada a DIARIOJUNIO de “mendaz, maliciosa, infundada e injusta denuncia mediática” de que el llamado a “licitación lleva implícito un tremendo negocio para personajes conocidos”. Sin embargo, tan cierto como puede ser esto, puede serlo la falta de argumentos más contundentes de parte del ministerio en relación a explicar mejor este cambio tan abrupto.
De la Rosa además, vale decirlo, no es un nombre nuevo en la política y desde siempre se lo relacionó con José Allende, el dipu-sindicalista eterno del pejotismo y UPCN (uno de los gremios del Estado) con un proceso judicial por enriquecimiento ilícito y con innumerables denuncias mediáticas por supuestos hechos de corrupción.
En política, se sabe, las relaciones no son ingenuas y aunque esta relación no signifique prueba de nada, forma parte de un combo que alienta a la denuncia a la sospecha o lo que sea. Cierto o no, se ha largado a rodar y cuando se trata de bienes del Estado, lo que corresponde es aclarar.
Aquí es donde entra el gobernador Bordet quien, cuando se difundiò e hizo conocer este episodio no estaba en la provincia, tampoco en el país. Ya se sabe que no ha querido atender a los afectados por este proyecto, tendría que hacerlo cuanto antes o al menos explicar mejor y con datos indubitables este embrollo que ya fue calificado por el Tribunal de Cuentas y sembró un mar de dudas.
AHORRO Y GENERICOS
Por último y si el objeto de toda esta movida fuera el ahorro, es inexplicable que el actual gobierno se niegue sistematicamente a poner en funcionamiento de una vez por todas, la fábrica de medicamentos genéricos que Sergio Montiel implementó en Federal y Jorge Busti destruyó de un plumazo.
La fàbrica de genéricos como bien lo ha señala el diputado Alberto Rotman (UCR-Cambiemos), sería una solución práctica y barata para todos los hospitales de Entre Ríos.
A cambio de esto, harán participar a multinacionales ávidas de ingresar al fabuloso negocio de los psicofarmacos y el material biomédico.