En tal sentido, el legislador presentó esta semana un proyecto de declaración en el que plantea la necesidad de que los estudiantes que asisten a las escuelas en zonas rurales regresen a las aulas, para garantizar la igualdad de condiciones en el aprendizaje.
“Las medidas preventivas pensadas para zonas urbanas de alta transmisión comunitaria y para alumnos que disponen de medios tecnológicos que garantizan el dictado de clases remotas, resultan perjudiciales para los estudiantes de escuelas rurales e implican un obstáculo más para que se garantice su derecho a la educación”, explica Mattiauda en los fundamentos del proyecto.
Agrega que “la aplicación de medidas restrictivas con relación al sector educativo” en toda la provincia, sin diferenciar zonas o sectores de acuerdo a la influencia del virus, “implica desfavorecer a aquellos estudiantes de zonas rurales que no se encuentran en igualdad de condiciones, y que requieren de la asistencia presencial a clases, para garantizar la recepción de conocimientos mínimos e indispensables”.
Para el diputado del Pro integrante del interbloque Cambiemos, “las zonas rurales cuentan con una menor densidad demográfica, con ínfimos o nulos niveles de contagio, y con una menor conectividad que posibilite el dictado remoto de clases virtuales”, factor desfavorable que para esos alumnos se suma a las dificultades habituales que enfrentan como “las extensas distancias que deben recorrer, el mal estado de los caminos y la falta de infraestructura, recursos e insumos que se encuentran a su disposición en las escuelas”.
El retorno a las aulas de los alumnos de las escuelas rurales beneficiaría además a los transportistas que los trasladan, porque volverían a trabajar tras 6 meses sin percibir ingresos. “Es uno de los sectores perjudicados que la está pasando mal porque no recibe ayuda, y que a pesar de no poder facturar debe seguir pagando seguros y manteniendo las unidades en condiciones”, puntualizó Mattiauda.