Además dijo que “el bache producido en la obra pública se debe a una reorganización de las estructuras del Estado a partir del festival de obras sin control de ejecución y de certificaciones con que se encontró el gobierno nacional”.
Mattiauda recordó que el Hospital Bicentenario “está paralizado desde enero porque se hizo insostenible para la empresa trabajar con precios de marzo de 2014, lo que generó problemas económicos por la falta de pago de las redeterminaciones presupuestarias por un monto cercano a los 100 millones de pesos, que durante todo 2015 no aprobó el Ministerio de Planificación a cargo de Julio De Vido”.
Bahillo desmintió que la provincia haya recibido 1.700 millones de pesos del gobierno nacional. “Es un dato inexacto. Yo tengo los decretos. Decir que Entre Ríos ha sido una de las cinco provincias más beneficiadas por la Nación, no es tan así”, retrucó el legislador. “Si no hay nuevos adelantos de coparticipación, a mitad de año vamos a quedar en cero con la Nación”, reafirmó. Además, destacó “la responsabilidad política y ética” con la que el gobernador Gustavo Bordet se relaciona con el gobierno nacional; y determinó que el mandatario provincial “está pidiendo la continuidad de la obra pública”. “Muchas de las obras están paradas y esto me preocupa fuertemente porque decae la actividad económica y los ingresos en las familias. Hay mucha gente que tiene un horizonte laboral bastante complicado; sumado al ajuste”, advirtió.
“Bahillo estuvo presente en la recorrida que funcionarios nacionales hicieron por el nuevo hospital, y sabe que se planteó un plan de trabajo para poder retomar la construcción cuya finalización ha quedado garantizada por el gobierno nacional, y ratificada por el ministro de Salud en su visita a Gualeguaychú la semana pasada”, dijo.
Agregó que “sorprende que, cada vez que puede, Bahillo se queje y critique lo que hizo el gobierno en casi cinco meses de gestión y por lo que cree que no va a hacer después, principalmente en obra pública que es una materia en la que el gobierno anterior dice haber invertido mucho pero la realidad muestra que hizo poco”.
“También le recuerdo al diputado que el mismo gobierno nacional y provincial que él acompañó y apoyó en todas las decisiones durante una década, prometió y no cumplió la pavimentación de la ruta 51. Obra cuya ausencia padecen hoy con mayor gravedad los pueblos del interior del departamento”, sentenció.
Mattiauda recordó además que la Ruta 51 “fue anunciada con bombos y platillos el 24 de marzo de 2011, en un acto que encabezó el entonces gobernador Sergio Urribarri. Con máquinas viales desparramadas sobre el camino, se anunció el inicio de obra que contaba con un plazo de ejecución de 18 meses con una inversión de 120 millones de pesos. Incluía la construcción de tres puentes y el acceso a Irazusta y Estación Parera”.
“El financiamiento de esa primera etapa iba a concretarse a través de Vialidad Provincial, con aportes compartidos entre la provincia y el Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (Prosap). ¿Se terminó esa ruta? ¿A dónde están los fondos? Hoy Parera, Irazusta, Almada, y los pueblos cercanos siguen sufriendo tanto como siempre las consecuencias de la promesa incumplida. Y esos también son datos de la realidad”, remarcó.
Tras insistirle con el “despilfarro de fondos del Estado en la gestión anterior”, en obras públicas que no se terminaron o que se sobrefacturaron, Mattiauda le recordó al diputado provincial el caso de la Municipalidad de Larroque que durante la gestión de Raúl Riganti (intendente FPV durante 8 años) licitó 14 cuadras de pavimento por un monto de ¡23 millones de pesos!, es decir poco más de un millón y medio de pesos cada una”. “Sin dudas es el pavimento más caro de la historia de la Argentina, con cuyos fondos se podrían haber construido más del doble de cuadras. Por ese hecho hay una denuncia efectuada por la actual gestión municipal”, sostuvo.
Las viviendas
En cuanto a los planes de viviendas, otro de los puntos por los que cuestionó Bahillo al gobierno nacional, el senador le respondió que “tanto el presidente Mauricio Macri como el ministro (Rogelio) Frigerio han sido muy claros al hablar de las prioridades de la gestión: los ejes serán proyectos de saneamiento como agua, cloaca y viviendas, y terminar las obras inconclusas de la gestión anterior”.
“En Gualeguaychú hay muchos barrios sin concluir lo que significa muchas familias esperando acceder a su vivienda, y la mayoría de esas obras fueron perdiendo ritmo hasta quedar paralizadas en los últimos meses del año pasado, cuando todavía gobernaba el FPV”, graficó Mattiauda y reflexionó: “Sería saludable que el tiempo que pierde el diputado en cuestionar al gobierno lo utilice en sumar su granito de arena a las gestiones, para que las obras y las inversiones lleguen a Entre Ríos y particularmente a Gualeguaychú”.