LAS QUEJAS
Este año la producción de frutas es muy buena según los dichos de los trabajadores que los patrones no desmienten. Sin embargo, protestan, tiran fruta y piden soluciones.
Lo que señalan básicamente es que han perdido mercados internacionales que comenzaron a copar otros países como Sudafrica, Chile y Perú.
La pérdida de esos mercados hace que, a los habituales exportadores les esté sobrando fruta. Esa fruta que les sobra a ellos, la vuelcan al mercado interno. Así las cosas, los que solo venden al mercado interno deben competir ya no solo con los que lo hacen siempre, sino que ahora, tienen un competidor adicional, el exportador que mete su fruta en el mercado interno.
LA INTERNA FEROZ
La interna en el sector es feroz desde hace tiempo y está lejos de resolverse. Quienes ayer protagonizaron el rompimiento de la unidad, fueron como otras veces, los de Villa del Rosario. Es más, hasta allí llegó el inefable Intendente de esa localidad, un taliban de la protesta agresiva.
Calificó a “esta movida" como "chiquita" y reprochó "que seamos los productores de acá nomás, vamos a perjudicar al chico y al pequeño productor, acá hay que cortar los puentes de Victoria, el Brazo Largo, no sirve cortar la citricultura solamente, (…) y no me pueden decir si un concejal mío (sic) cargó fruta o no cargó", dijo en referencia a las críticas por la falta de solidaridad con la protesta de algunos productores de la zona,.
LOS PRECIOS SEGÚN LA FECIER
En el mercado internacional se estaría pagando US$ 10 una caja de fruta.
En el Mercado Central (interno) el kilo de naranja vale $ 2. Un cajón que tiene 20 kilos se vende a $ 40 y la gente la paga hasta $ 20 el kilo.
Frente a este panorama pintado por la organización que nuclea a los productores, el titular de la misma Dante Grigolato expresó : Lo que uno pide son políticas adecuadas al sector. Que lo vuelvan a hacer rentable como era años atrás cuando Argentina estaba en los primeros lugares de las exportaciones de cítricos dulces”, dijo.
BREVE RESEÑA : PRODUCCION E INVERSIÒN
Sería ocioso repetir lo que desde este diario hemos venido manifestando con números.
Para refrescar la memoria. En el quinquenio 2005/2010 el crecimiento en toneladas de citrus fueron estos : 674.418 ; 739.081 ; 937.271 ; 716.328 ; 757.566 y 773.444.
La fuente de esta información (por si se dudara) es el INTA y está publicada en el libro Piqueteros Pudientes.
Es decir, hablamos de años en los que a los productores les fue muy bien como al resto de las actividades del país, sin embargo el contraste de esto con los niveles de inversión es elocuente.
De las aproximadamente 40.000 has plantadas con citrus en la provincia, solo el 20 %, o sea 8 mil, tienen riego y producen casi la misma cantidad que el 80 % restante. Esas 8000 has producen el 43 % de todo el citrus que se produce en la zona. Los datos también son del INTA.
El punto es que la falta de inversión en sistemas de riego provoca que nuestra citricultura, este años luz de los países que ganaron mercado.
Para ser más precisos. Hoy lo aconsejable para lograr máxima rentabilidad es tener alrededor de 1200 plantas por hectárea mientras que nuestros productores solo tienen (en una porción mayoritaria) apenas 400 plantas por hectárea. O sea, les falta triplicar para producir màs y mejor.
El otro dato a destacar es que la falta de riego y el trabajo constante que necesita la planta para crecer vigorosa, es la diferencia entre una buena y mala fruta. Esa mejor o peor fruta es la que compite tanto en el mercado internacional como local. Hay estudios que aseguran que si la fruta fuera mejor, el consumo interno sería mayor.
TRABAJADORES EN NEGRO Y TERCERIZADOS
Según los delegados de fábrica y de quintas de Citricola Ayuí, la empresa tenía en el momento más álgido del conflicto, alrededor de 120 trabajadores en blanco y más de 600 en negro.
O sea, la tercerización es una de las características más brutales del negocio. Dejan a los trabajadores con obras sociales fundidas y con haberes jubilatorios esmirriados, por lo que, a pesar de tratarse de trabajadores y no de vagos, es el Estado debe recurrir en su ayuda, pues de lo contrario, carecerían de salud y al final de su vida laboral, sin aportes o con aportes que de poco servirían.
Vale decir que DIARIOJUNIO ha mostrado recibos de trabajadores que lo hacen para alguna de las tantas empresas truchas contratadas por las grandes firmas, que hacen figurar en los recibos apenas 3 o 4 días trabajados por quincena.
Como dice el dicho popular, la culpa no es del chancho sino el que… En otras palabras, la nula inversión, la permisividad del trabajo en negro, los constantes subsidios y regalos al sector, deben llegar a su fin cuanto antes. No ha resuelto ninguno de los problemas de la citricultura y lo que es peor, se han agravado los existentes.
La vieja historia de privatizar las ganancias y socializar las pérdidas toca su fin.
