Satisfecho por la aceptación del programa entre los pequeños contribuyentes, el Director General de Rentas, Aurelio Miraglio, no dejó de observar la relativamente baja concurrencia de comerciantes responsables por el Impuesto sobre los Ingresos Brutos y profesiones liberales.
En este sentido, remarcó que “cada uno es responsable por las decisiones que toma. Lo cierto es que oportunidad estuvo al alcance de todos. Quien no sinceró su situación queda expuesto a las generales de la ley. Y es obvio que la DGR irá primero contra ellos con todo el respaldo que le dé la ley”, dijo el funcionario.
Finalmente el funcionario mencionó las tres grandes líneas de acción para el 2005. “Vamos a mejorar la fiscalización a los grandes contribuyentes, vamos a mejorar los servicios al contribuyente y vamos a seguir de cerca el cumplimiento de la moratoria. De esa manera vamos a poder sostener los niveles de recaudación que el Estado necesita para poder atender los servicios que le competen”.
