El asambleísta informó que la mujer hizo una serie de cuestionamientos en los que afirmó que “iba a arremeter contra cada uno de los asambleístas, a los cuales consideraba como responsables”. Además mostró su preocupación por todo lo que ocurre, lo cual altera el espíritu familiar como laboral, “es un hecho totalmente lamentable, sumamente triste y que realmente nos destruye a todos emocionalmente que haya sucedido esto pero de ninguna manera te podés hacer cargo”.
Por su parte descartó tener conocimiento si algún par suyo de la Asamblea Ambiental también fue víctima de algún mensaje intimidatorio por parte de algún familiar. Alazard no quiso hablar del fallecido, “nadie sabe cómo son las cosas, cómo sucedió y porqué sucedió”.
También hizo mención a lo que era la ruta 136 esa noche, donde una densa niebla cubría toda la zona desde Arroyo Verde hasta el Puente Internacional, “volví a la una de la mañana, minutos antes de que sucediera el accidente y lo hice a paso de hombre porque no se veía ni a dos metros y me consta que el acoplado estaba donde estaba siempre”. Prosiguió: “es mentira que el acoplado estaba atravesado en la ruta, es más, cuando nos vinimos, la barrera permanecía levantada y el paso estaba abierto porque iban y venían permanentemente”.
Alazard reconoció que ayer también recibió otro llamado pero de una menor intensidad que los dos anteriores. Este último habría sido de una señora que se reconoció como familiar pero utilizó un tono “no tan amenazante sino un diálogo franco”. “Me dejaron un número de teléfono y ahora en una escapadita voy a tratar de llamar a esa señora para concretar una entrevista porque no soy de esconderme en ningún lado. Comprendemos el dolor de esta gente pero no pueden buscar cabezas de turcos o chivos expiatorios para pegarles”.
Fuente: El Día
