El detenido relató que intentó efectuar dos disparos. “Efectuó uno solo porque el otro, hay una bala percutida y no se disparó”, precisó el letrado. Al mismo tiempo, “no da un fundamento racional de porque hizo esto”, añadió. Rodríguez Allende agregó su interpretación: “lo mata para robar la plata”. El letrado no se privó de responder a los argumentos del defensor, quien dijo que la acusación no tenía sustento, carecía de lógica. “A las pocas horas demostramos que los lógicos y coherentes hemos sido el fiscal y la querella”, señaló
“Las sospechas que nosotros teníamos y las evidencias que se dieron a conocer el viernes en la audiencia pública cuando solicitamos la prisión preventiva, no eran meras sospechas sino que estábamos dentro de la verdad”, indicó el abogado querellante. “Hay una confesión dentro de las garantías del debido proceso”, dijo el querellante. “El fiscal tomó fiel nota de sus declaraciones. Reconoce haber llevado esas balas y haber trasladado la camioneta de Rosatelli, haber producido el agujero donde estaba el dinero. Es decir reconoce el 99 % de las evidencias”, manifestó el abogado.
“Esto evidentemente nos demuestra que estábamos en la vereda correcta y el camino correcto. El autor responsable no es otro que esa persona que es un gran psicópata pero que comprende la criminalidad de sus actos”, manifestó Rodriguez Allende. La definición de psicópata se debe a que, para el letrado, Marsicano planeó los acontecimientos. “Utilizó los medios periodísticos para intentar aparecer como víctima. Se victimizó el viernes, ustedes lo pudieron ver, haciendo actos de llorar y un comportamiento propio de un psicópata que cambia permanentemente la conducta”, manifestó.
Más adelante, el abogado paranaense señaló que la hipótesis que circulaba entre los periodistas que cubren el caso, de que la carátula de la causa cambie por la de homicidio culposo a raíz de la confesión, fue tajante y sostuvo que “de ninguna manera”. “Es imposible, ni un niño de tres años puede pensar en un cambio de la calificación legal. Está probado que hay dos agravantes, la alevosía (la víctima estaba dormida sin posibilidad defensa) y el robo”, indicó. En ese sentido, para la querella Marsicano no sustrae el dinero para que parezca un robo con desenlace trágico subo que fue al revés. “Cuando se mata para no dejar evidencia de un robo, es homicidio agravado”.
En menos de dos semanas, el caso está prácticamente resuelto. Respecto del futuro de la causa, señaló que el productor agropecuario seguirá con la prisión preventiva y estimó que antes de fin de año se llevará cabo el juicio oral y público. En tanto, la tarea de la fiscalía seguirá siendo tratar de producir la mayor prueba posible. La confesión podría ser aun atenuante para el dictado de la pena pero como no cambia la calificación legal, y la sentencia es a cadena perpetúa, Rodriguez Allende fue escéptico respecto de una mejora de la situación legal de Marsicano.
Más adelante, destacó el “olfato” de Lafourcade para efectuar el allanamiento a las pocas horas. En ese sentido, si Marsicano hubiese tirado las balas, lavado la camisa y quitado los rastros de plomo y bario en sus manos: “hoy estaríamos hablando de un hecho impune con un montón de conjeturas”.
Por último, sostuvo que Marsicano necesita ser tratado por tratarse de una personalidad psicópata. “El día de mañana, en la Unidad Penal, podrá tener el tratamiento que toda persona que cometió un delito de tremenda gravedad con los agravantes que significan matar a un íntimo amigo. Simula una victimización en los medios de comunicación, sacandose fotos, hablando de que esto fue la policía, que tiene miedo a la persecución”, señaló.