En el marco de la política de Estado, que se viene llevando desde la reapertura de las causas y de la nulidad de las leyes de impunidad, Mario Alfredo Amestoy se presentó ayer como querellante, y a su vez para dar testimonio, ante el Juzgado Federal Nº 2, Secretaría Nº 1 de San Nicolás, Provincia de Buenos Aires en la causa que se abrió por la Masacre de la calle Juan B. Justo, en la que fueran asesinados su hermano, Omar, su cuñada, María del Carmen Fettolini y sus sobrinos, María Eugenia y Fernando, junto a Ana María del Carmen Granada de Gonçalvez.
Luego de la presentación “Fredy” Amestoy expresó que “declaré todo lo que sabía y lo que había vivido en ese momento y hoy partir de esta presentación comenzamos a recorrer el camino de la verdad y la justicia, después de los años de plomo de la dictadura y de 23 años de silencio de los gobiernos democráticos en los que la justicia hizo oídos sordos a nuestros pedidos es hora de que dejemos de tapar a estos crápulas para que vayan cárceles comunes en lugar de caminar por las calles junto a nosotros”.
Y agregó que “también es la oportunidad para que la sociedad pierda el miedo y no se deje amedrentar por los poderosos de siempre, por los asesinos de siempre, por los privilegiados de siempre. Es hora de terminar con la impunidad y de sentar en el banquillo a los genocidas” concluyó.
En tanto que Florencia Amestoy, sobrina de Omar e Integrante de la agrupación H.I.J.O.S Regional Paraná dijo que “hace 30 años que estamos esperando. Es momento de exigir a la justicia y a los jueces por los padres que buscan a sus hijos, por los hijos que buscan a sus padres, por las abuelas que buscan a sus nietos. Es importante para la familia, pero también para la sociedad, para que sepan que no hay que tener miedo, porque las amenazas son producto de la lucha, porque se sienten acorralados a 30 años finalmente se está haciendo justicia”.
Omar Darío Amestoy nacido el 29 de octubre de 1947 en Nogoyá, provincia de Entre Ríos, al igual que su mujer María del Carmen y sus hijos María Eugenia y Fernando, se recibió de escribano público de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional del Litoral.
Su militancia en el peronismo comenzó en la facultad cuando se acercó a militar en el Ateneo, agrupación estudiantil que se comenzó a formar cuando se fundaron casas para alojar a estudiantes universitarios llamados Colegios Mayores y que luego de un tiempo traspasó las fronteras universitarias y se comenzó a volcar a la militancia barrial y sindical. Al igual que Omar, que por ese entonces había regresado a su ciudad natal y se hizo cargo del Registro de la Propiedad de Automotor. Casándose al poco tiempo con María del Carmen Fettolini, quien había nacido el 29 de octubre de 1947 y que ya se había recibido de maestra jardinera.
El 1 de octubre de 1971 nació la primer hija del matrimonio, María Eugenia y el 10 de julio de 1973 Fernandito, como le decían en la familia.
Pero la conformación de la familia no lo alejó de la militancia que había iniciado desde muy temprana edad, militancia a la que se sumó su compañera “Pochi” y que los llevó a unirse a la Agrupación Montoneros, participando desde la Juventud Peronista
Esta decisión hizo que cuando se produjo el golpe de Estado el 24 de marzo, los cuatro debieran trasladarse por las amenazas que sufrían.
Primero se radicaron en Santa Fe, pero dada la cercanía con Entre Ríos se trasladaron a la provincia de Buenos Aires, exactamente a San Nicolás.
Allí en San Nicolás comenzaron a vivir con Ana María Granada, quien al poco tiempo tuvo a su hijo Manuel.
Ana María estaba casada con Gastón Roberto José Gonçalvez, quien había sido detenido el mismo 24 de marzo de 1976 y alojado en la Comisaría de Escobar, partido de Belén de Escobar y del a pesar de los habeas corpus presentados por su familia no se sabía nada.
El 19 de noviembre de 1976 en horas de la mañana fuerzas conjuntas de Ejército, Policía Federal y Policía de la Provincia de Buenos Aires, quienes contaban con el apoyo de personal de Investigaciones de la Policía de Santa Fe y que sumaban más de cincuenta efectivos llegaron al domicilio de calle Juan B. Justo 668 donde se encontraban Omar de 31 años, su mujer María del Carmen, con 29 años, sus hijos María Eugenia de 5 años y Fernando de 3 años, Ana María y Manuel, quien ya tenía cinco meses.
Tras casi una hora de tiroteos contra la vivienda ingresaron al domicilio y asesinaron a los tres mayores y a los dos menores, María Eugenia y Fernando quienes se encontraban en el baño, por ser el lugar más seguro de la casa al no dar ni al frente ni a los fondos Manuel Gonçalvez fue el único sobreviviente de la masacre ya que se encontraba envuelto en frazadas dentro de un placard.
Omar, María del Carmen, María Eugenia y Fernando, fueron entregados a su familia días después a cajón cerrado y se encuentran en el cementerio de Nogoyá.
Actualmente se encuentran detenidos por esta causa el Coronel (RE) Manuel Fernando Saint Amant quien fue Jefe del Área Militar 132 y del Batallón de Ingenieros de Combate 101 de San Nicolás entre 1975 y 1977, y además era Oficial de Inteligencia del Ejército y el Comisario General (RE) Jorge Muñoz era Jefe de la Delegación San Nicolás de la Policía Federal Argentina con el grado de comisario.