Casi 200 personas protestaron en el centro de San Diego para denunciar la llegada del mandatario y su flamante muro, una de sus principales propuestas de campaña. Mientras que este martes se esperan varias manifestaciones contra un Trump que mantiene su itinerario en secreto.
Trump visitará California, un estado que perdió por más de cuatro millones de votos en las elecciones de 2016, sin reunirse con líderes políticos y sin efectuar mítines de ningún tipo; contrario a lo que acostumbra hacer en estados donde predomina el electorado del gobernante Partido Republicano.
Solo trascendió que el jefe de la Casa Blanca ofrecerá un discurso ante militares y se reunirá con posibles donantes para el Comité Nacional Republicano, como parte de una agenda de 24 horas en la cual también podría retomar la tensión con México.
El Gobierno mexicano canceló el mes pasado una visita del presidente Enrique Peña Nieto a la Casa Blanca tras una dura conversación telefónica sobre el muro, y Trump envió la semana pasada a México a su yerno y asesor, Jared Kushner, para tratar de rebajar las tensiones.
Sumado a esto, Trump arribará al estado en un momento en el cual su Gobierno demandó a California por sus leyes respecto a las ciudades "santuario", que limitan la colaboración de las Policías locales con las autoridades migratorias federales.
