La decisión fue sugerida por el director de la Regional Noreste de Arquitectura, José María Castagnini, quien les pidió ayer a las autoridades de la escuela que inicien las clases porque la empresa hoy iba a instalar el obrador. Los docentes verificaron precisamente a primeras horas de la mañana que la empresa comenzó a levantar el depósito de herramientas y materiales.
En consecuencia, decidieron que las clases comenzarán mañana, 16 días después del inicio del ciclo en toda la provincia. Otra secretaria del establecimiento escolar, Silvina Boggia, indicó que el muro perimetral “no va a ser la solución para todos”. No obstante, luego opinó que será: “un atenuante importante para contener y proteger a nuestros alumnos y al personal que está dentro de la escuela”.
El otro inconveniente que sufrió la escuela fue el robo de un tanque de agua perpetrado el lunes de la semana pasada. Los ladrones se llevaron el tanque y un tramo del caño que conectaba el tanque con la red que abastecía al nivel inicial (jardín de infantes). Pero, ayer por la tarde, Arquitectura instaló el tanque de agua, y la escuela ahora cuenta con el servicio de agua potable.
Una madre, consultada sobre la tardanza para comenzar el muro, expresaba: “estos ya hace tiempo que vienen prometiendo el muro. ‘Que va a empezar la semana que viene, que va a empezar la otra’, y así”, indicó. La señora se lamentaba, teniendo en cuenta que el calendario ya consumió dos semanas de clases, al señalar: “nunca han cumplido lo que han prometido”.
La señora describió el estado del edificio: “las aulas están sin vidrios y las puertas, hechas p… todas rotas, no hay luz”. Únicamente rescató el estado de los baños, que fueron remodelados durante el verano.
La escuela es víctima de sucesivos robos, debido a que el tejido perimetral está roto. “Han entrado no se cuantas veces, se han llevado todo. Han robado varias veces, no es la primera vez, y nadie hace nada”, aseguró la señora.