Los manifestantes, en su mayoría personas que desarrollan actividades culturales en las esquinas de la ciudad, además de integrantes de algunas agrupaciones carnavaleras, leyeron un documento donde denuncian que la ordenanza cuestionada los precariza económicamente, además de violentar su libertad y el derecho a elegir ser trabajadores callejeros. También manifestaron estar cansados de la “violencia policial y estatal” en una de las ciudades “con más altos índices de desocupación y pobreza”.
“Es un ataque directo a todas las personas que hacen algo alternativo a todas las personas que no transen con la municipalidad. Eso no se puede permitir; hay que organizarnos y tumbar esto”, añadió uno de los reclamantes. Además, reclamó por la precarización de sus ingresos. “Vivimos del arte y cuando nos ofrecen un supuesto trabajo, siempre es un trabajo mal pago porque siempre están desvalorizando al artista”, indicó además.
El jueves pasado, el Concejo Deliberante aprobó una ordenanza que regula la actividad de cuidacoches, malabaristas callejeros y prestadores informales de servicios de limpieza a vehículos en la vía pública, comúnmente denominados “trapitos”, que «contempla tanto limitaciones como medidas de contención».
Específicamente, la ordenanza aprobada por el Concejo Deliberante establece en su artículo 1° que no se permitirá “la actividad en la vía pública de servicios de estacionamiento y/o cuidado de vehículos y/o cuidacoches, servicios de limpieza o lavado de vidrios y/o de vehículos “denominados trapitos”, y toda otra actividad de similares características”.
Mientras que el artículo 2° determina que “no se permitirá, en el ámbito de la ciudad de Concordia, el desarrollo de toda actividad de malabarismo o circense que se realice con elementos que puedan generar un perjuicio y/o peligro para los propios artistas y/o transeúntes. Entiéndase por elementos de peligro: fuego, armas, armas blancas, palos de gran magnitud y todo aquel que utilizado sin los medios de seguridad pertinente puedan generar un daño”.
Al día siguiente, el presidente del bloque de concejales del Frente de Todos, Gastón Etchepare, sostuvo que los artistas callejeros que están en la peatonal o en las plazas no están prohibidos sino los malabaristas que se paran en las esquinas para hacer muestras de destreza con diversos elementos que arrojan al aire. Etchepare dijo que corren riesgo de sufrir un accidente además de manipular objetos filosos como cuchillos o peligrosos para sí mismos y para terceros como antorchas encendidas.
