Representantes de una institución eclesiástica llevaron al ministerio un documento que insta a consensuar con las partes para poner fin al paro, completar los pagos pendientes y reiniciar las clases esta semana.
De este modo, los católicos aseguraron a los educadores que sus problemas serán resueltos. El presidente de la Asociación Nacional de Educadores, Gilberto Cascante, consideró que el respaldo de la iglesia es de vital importancia en lucha por la reivindicación salarial.
"Nosotros lo que buscábamos era un garantía de que se nos iban a realizar esos pagos y la Iglesia entró a darnos esa confianza", expresó Cascante tras agradecer a los católicos por su colaboración y garantía.
La propuesta de los católicos es similar a la presentada por los educadores el pasado miércoles para tratar de concretar un acuerdo con el gobieno, que después no fue seguro. Ambos contemplan el pago a los maestros en alguna de las 27 sedes regionales del Ministerio de Educación Pública (MEP).
Además, descartan la aplicación de sanciones a quienes participaron en la huelga, así como la conformación de una Comisión Especial del MEP y los sindicatos para analizar casos de problemas salariales que no hayan atendido.
El gremio está en paro desde hace cuatro semanas en el país por incumplimientos de los pagos de los meses de enero y febrero, así como por recortes no justificados en los salarios de algunos de ellos, una situación que afecta a unos siete mil educadores.
“La presencia de monseñor José Rafael Quirós como garante nos tiene muy satisfechos porque nos garantizó el alcanzar este acuerdo”, declaró por su parte la ministra de Educación, Sonia Marta Mora.
Mientras, el diputado del Partido Unidad Social Cristiana, Johnny Leiva, pidió investigar al exministro del MEP, Leonardo Garnier, y a otros miembros de su equipo por casos de pagos ilegales a supuestos docentes durante su gestión (2006-2014).
