Luego del conflicto de los arandaneros, el delegado de la Dirección de Trabajo remarcó: “yo ya dije que acá había empleadores y explotadores”

En diálogo con el programa “Cuarto Poder” (Oíd Mortales Radio), Giles detalló que ante esa situación, “yo lo reprendí a ese capataz, remarcándole que él también era un trabajador”, y que en todo caso la gente reclamaba “porque les habían dicho que les iban a pagar a la mañana y eran las tres de la tarde y no les habían cumplido”.
El titular de la delegación local de la Dirección Provincial del Trabajo especificó que se procedió a labrar un acta de constatación de personal, verificando la presencia de mas de 300 trabajadores, si bien en el padrón de esa firma figuran 710 trabajadores, los cuales estaban diseminados en varias hectáreas a las redonda “por lo que era materialmente imposible verificarlos a todos”.
En ese trámite fue que se debió labrar un acta de obstrucción, por ocultamiento de pruebas. “Porque cuando quise controlar las tarjetas del personal que estaba en un tablero a la entrada del establecimiento, fueron retiradas por un empleado de vigilancia, con la evidente intención de esconder las cosas. Por esto tuve un altercado con el empleado de seguridad y con el encargado, a quien le remarqué que no acostumbro a mentir, porque lo que veo lo escribo”.
Sobre e tema de las credenciales de ingreso y egreso del personal Giles manifestó una sospecha que, de constatarse, sería de una gravedad importante. Ya que según explicó “no nos enteramos que las tarjetas no las marca el personal. Ya que por lo que nos comentaba la gente, los encargados de vigilancia lo hacen a la hora que ellos creen conveniente”. Evaluando que de ser así, sería para que repercuta en las liquidaciones.

Logros

Giles destacó que además del pago de todo lo adeudado, se logró “que de Paraná nos envíen un inspector de Seguridad y Trabajo”. Quien constató “la poca cantidad de baños para todo el personal, que son insuficientes. Además que los baños son los mismos para los trabajadores de los dos sexos. Que no existen los comedores y que había un techo de plástico, que según dicen iba a ser el comedor”.
Giles ratificó que tal como decían los trabajadores, “yo ví la gente comiendo en el suelo, ví el sanguchito que le dan, con una manzana de postre y una botella de gaseosa para compartir entre cinco y tomando del pico, porque tampoco los proveen de elementos como vasos. En algo totalmente antihigiénico y una falta de respeto”, remarcó.
Consultado sobre porque se daban estas irregularidades sin que trasciendan, el titular de la DPT local reconoció que no sabía que pasó. “Porque hace 45 días estuvieron haciendo inspecciones del Ministerio de Trabajo de la Nación, y habían constatado alrededor de 56 trabajadores. Nosotros ahora encontramos mas de 300, quiere decir que se aumentó la cantidad de trabajadores”.
Sobre las medidas que podrían tomarse para con la empresa, Giles enumeró que “en principio estaba la posibilidad planteada por el inspector de Higiene y Seguridad, para cancelar la planta”, pero esto haría perder días de labor a los trabajadores.
“Entonces conveníamos con el Inspector que se dieran 24 horas para la instalación inmediata de los baños, que es fundamental para la higiene de los trabajadores. Y otro plazo también bastante corto ara la instalación de los comedores. De esa manera vamos a seguir avanzando”. Aclarando que “no esta en nuestro ánimo aplicar sanciones, sino que se corrijan las cosas que están mal”.

Despedidos

A diferencias del Secretario General de UATRE Concordia, que intentó minimizar el punto, José Giles adelantó que “desde la Dirección Trabajo, mas precisamente desde la oficina de Relaciones Laborales, vamos a convocar a la empresa. Ya convocamos a los trabajadores para que concurran a hacer el reclamo formal, ahora vamos a citar a la empresa, para que esta gente vuelva a su trabajo”.
En ese aspecto Giles trajo a colación que “yo ya dije que acá había empleadores y explotadores. Al que le quepa el sayo que se lo ponga”. Advirtiendo que “nosotros vamos a seguir caminando y recorriendo estos establecimientos, con los medios que tenemos. Y creo que si Dios y la gente nos ayuda vamos a seguir, porque sabemos que vienen inspectores de otros lados, pero luego se van. Nosotros tenemos que seguir dando la cara al trabajador, porque después lo cruzamos en la calle. Entonces somos los que tenemos que darle una solución a estos problemas”.
Por último manifestó que desde el ámbito provincial se le dio importancia, puntualizando que su superior Oscar Balla “envió inmediatamente inspectores de Higiene y Seguridad y realmente fue buenos eso”, a lo que agregó que “uno de los que mas se preocupó fue el ministro Urrubarri, porque es de Concordia y todos los que somos de Concordia debemos estar preocupados sobre este tema”. Concluyendo conque su deseo es que “las cosas se sigan solucionando, para que el trabajador no siga siendo el medio que los patrones utilicen, para ser cada vez mas ricos”.

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