La medida de fuerza fue suspendida momentáneamente debido a que la empresa “hizo gestos, acciones como para solucionar este problema por esta semana”. El viernes 18 de agosto se realizará una asamblea binacional por este tema. “También se le dio a la mesa coordinadora la autorización para que siga tramitando todo lo que sea el traslado de ese edificio al otro”, puntualizó Sosa al diario Noticias.
Provisoriamente, los trabajadores quieren salir del edificio, que alberga 70 personas, hasta que se construya uno nuevo. “Según la secretaría de Energía, nos informó que el dinero estaba para realizar el edificio nuevo para todo el personal”, agregó. El personal del gremio estaba al tanto de la partida para la construcción, pero confirmaron plenamente el dato cuando el secretario de Energía, Daniel Cameron, les preguntó –en ocasión de la reinauguración de la estación transformadora de Colonia Elía-, “¿el edificio se hizo?”, porqué el dinero está”, según Sosa.
Pero el desencadenante fue el descubrimiento reciente de un nuevo caso del lado uruguayo. “Estadísticamente no tenemos y por respeto no hablamos. Pero sí, los compañeros se movilizaron porque tenemos un compañero con una situación de enfermedad y cuando están las cosas así ya empieza el pánico, tenemos miedo”, explicó Sosa.
En forma temporal, los trabajadores que se desempeñan en el edificio cuestionado se trasladarían a otro lugar de la represa. “Los compañeros pidieron el edificio de almacenes o Relaciones Públicas, margen izquierda”, expresó Sosa.
Líneas de alta tensión, en la mira
En Salto Grande, los planteos del personal sobre las condiciones laborales comenzaron en 2002, cuando comenzaron a percatarse que había numerosos casos de cánces. Inmediatamente, las líneas de alta tensión fueron puestas bajo la lupa.
La incertidumbre acerca del tema era el denominador común. Lo más lógico es aferrarse a las explicaciones científicas sobre el tema. Por ese entonces, el abogado Roberto Beherán había dejado de ser vocal de la CTM de Salto Grande. En una entrevista realizada en 2002, explicaba que se habían realizado investigaciones y estudios, e incluso un experto de la OMS (Organización Mundial de la Salud) había dado una charla al sindicato, personal de la Cooperativa Eléctrica y del municipio.
“De los elementos que daba, manifestó concretamente que no está acreditado científicamente que haya una relación entre el cáncer y los campos electromagnéticos en la cantidad de microteslas como habría acá en la represa de Salto Grande”, señalaba el letrado
Beherán citaba que, durante 2001, “la OMS, a raíz de todo este tema que se estaba generando en el mundo, adelantó la opinión que no hay pruebas científicas que exista relación entre los problemas de cáncer, y los problemas electromagnéticos. Era una adelanto del informe general que se va a dar en el año 2005”, expresaba.
Con esos elementos, el ex-vocal decía no tener elementos para rebatir una postura proveniente de la máxima autoridad sanitaria a nivel mundial. “Si no confiamos en ellos; si hay que dirimir entre lo que dice un diario y lo que dice el experto de la OMS, en principio me quedo con lo que dice el experto de la OMS”.
Incluso, explicaba que había factores internos que tenían incidencia en esas situaciones pero no ascendían a la superficie. “Muchas veces, dentro del propio personal se pasan facturas porque no les gusta la cara de los delegados o la parte gerencial. Por eso, muchas veces dentro de estas cuestiones se dirimen otras cuestiones”, expresaba.
En esa misma época, el sindicato comenzó a pedir el traslado del personal que se encuentra en dos edificios ubicados sobre ambas márgenes debajo de dos líneas de alta tensión. El secretario general de Siatrasag en aquel entonces, Tomás Ruíz Díaz, comentaba que “en una asamblea que se hizo en margen derecha e izquierda, se le pidió a la empresa para que se sacara de servicio la línea que pasa por arriba del edificio. La empresa optó por ‘desenergizar’ dos máquinas. O sea, entran en servicio esas máquinas de 18 a 23 hs. en las horas pico. No pidieron un plazo de 15 días para ver que decisión se va tomar, si se la va tomar, si se la va a trasladar o que solución definitiva se va tomar”.
Posteriormente, las autoridades cedieron y el personal se trasladó al edificio de Relaciones Públicas. Simultáneamente, se realizó una denuncia a la SRT. “El expediente fue cajoneado sin querer. El año pasado, vino la SRT pero la empresa pidió que se haga en forma conjunta”, expresaba el sábado Sosa. En Uruguay, la repartición encargada de fiscalizar la situación laboral a nivel nacional es la Inspección de Trabajo.
“Se hizo una visita en forma conjunta el año pasado; hace 15 días atrás volvieron a juntarse. Es un informe con otro informe, realmente estamos esperando esa intervención. La denuncia ya está hecha”, añadió la titular de Siatrasag.
“Realmente estamos esperando que se tomen cartas en el asunto, por ahí hay trabas en que como es una empresa binacional, no puede ir sola por un lado, del otro tampoco, tiene que hacerse en forma conjunta. Una vez que tengan el informe, posiblemente se pongan a trabajar”, dijo, por último, la secretaria general de Siatrasag.
