“Estamos en manos de los santiagueños”, deslizó este viernes a parlamentario.com un legislador oficialista, al admitir lo ajustados que están los números para llegar a los dos tercios necesarios para lograr el desplazamiento del diputado nacional Julio De Vido. Se refería al Frente Cívico por Santiago, un bloque que estuvo alineado con el Frente para la Victoria durante sus doce años en el poder, y que se mostró cercano a las necesidades del Gobierno actual, las veces que lo necesitó.
Seis diputados tienen esa bancada, lo cual no es poca cosa, máxime cuando la búsqueda de los dos tercios se le hace tan cuesta arriba al oficialismo.
Pero este viernes por la noche el presidente de ese bloque, Cristian Oliva, dio por tierra con esas especulaciones. Lo hizo a través de una declaración a la que tuvo acceso parlamentario.com, en la que adelantó que no acompañarán la exclusión del exministro de Planificación Federal.
“Lamentamos que estas discusiones de importancia para las instituciones de la República, se la dé en un contexto de presión que marca para algunos el calendario electoral, en especial por la puja política en la elección de la provincia de Buenos Aires”, expresó Oliva, para señalar luego que el artículo 66 de la Constitución “no deja dudas en cuanto a la inconstitucionalidad de una eventual remoción del diputado De Vido, tal como lo sostienen muchos constitucionalistas, y como lo advirtieran con claridad miembros del propio oficialismo como es el caso del diputado Ricardo Alfonsín”.
Oliva aclaró que “si estuviéramos ante un pedido de desafuero basado en fundamentos dentro de un correcto marco jurídico, que para nada se da en este caso, seguramente lo estaríamos analizando desde otra perspectiva”. Así las cosas, el jefe del bloque santiagueño adelantó que “nuestro bloque no va a acompañar una exclusión de un diputado nacional, sea quien sea, que se pretenda aprobar en contra de un precepto constitucional”.
Así las cosas, resta para el Gobierno esperar solo que los santiagueños se ausenten a la hora de votar, eso es lo máximo que puede pedir, y fue lo que sucedió cuando el año pasado se votó la autorización para allanar las propiedades de De Vido. Si por el contrario, votan contra el dictamen de Cambiemos y el massismo, las posibilidades de alcanzar los dos tercios serán prácticamente nulas.