REALIDAD Vs CANTO DE SIRENA
Luego de la crisis del 2001, el default, la desocupación, el hambre y la pobreza, llegó al país un gobierno que, con sus más y sus menos encarriló una situación social, económica y política que parecía no tener vueltas. Ese estado de cosas horribles que vivíamos, se sintetizaba en una consigna “Argentina tiene una salida : Ezeiza”.
De esa situación caótica se pasó a un país cuyo PBI comenzó a crecer a tasas chinas, generaba trabajo y producción, el comercio florecía y de ese estado de angustia permanente se pasó a otro donde comenzábamos a recuperar la confianza en nosotros mismos.
Esa bonanza económica que se sentía, debía llegar a la mayor cantidad posible de población para lo cual era necesario repartir las utilidades que, en ese momento eran generadas por la tierra, debido a las ganancias extraordinarias que producían los comodities.
La sola mención de distribuir la riqueza como plan de gobierno resultó una opción insoportable a los oídos de quienes siempre han pensado el país como un coto de caza.
Allí comenzó la grieta, la violencia verbal, las campañas difamatorias, las operetas de prensa, la utilización brutal de las redes, etc. etc. allí comenzaron a pudrirle la cabeza a la sociedad.
No podían soportar que el poder político estuviera en manos de un sector que se disponía a no arrodillarse a su fenomenal poderío y a enfrentarlos. Por primera vez luego de muchos años, el país tenía un gobierno dispuesto a hacer valer los intereses de la mayoría por encima de las minorías privilegiadas.
Los poderosos entendieron que había que hacer tronar el escarmiento y empezaron a mostrar los dientes. Les llevó 7 años (2008-2015) hasta que lo lograron. Con la complicidad de vastos sectores incluida la izquierda dura y la izquierda paqueta, recuperaron para sí el poder político.
ERA PARA ESTO…
A nadie que conociera la historia de este país, que tuviera conciencia de clase, que conociera la historia reciente y antigua de esta tierra podían embaucar, pero había muchos a los que sí podían engañar y el dato que los animaba a profundizar la disputa lo tuvieron con el conflicto por la 125.
Lograron lo que era casi imposible de lograr, lograron que obreros, comerciantes, estudiantes y una multitud de pobres diablos salieran a las calles a defender el interés de los ricos que luego atentarían contra los pobres.
Una proeza. Mientras ellos destruían el país y su economía con un corte de ruta internacional que duró 3 meses, había un amplio sector social que los apoyaba. Increíble.
Finalmente y con ese antecedente se lanzaron a ganar el poder político nacional y lo lograron.
Para que querían ese poder?
Para lograr pobreza 0 ; dialogar con todos ; hacer una república, generar trabajo de calidad, dejar todo lo bueno y cambiar lo malo y, por sobre todas las cosas, traer honestidad y manos limpias, transparencia y virtualidad a la política y acabar con la grieta, tranquilidad social. ¿ y ?
Y… nada, pura mentira, mintieron para esto que vemos hoy. Abrir el juego para que los de siempre se la llevaran toda y volvieran a dejar al pueblo hambreado, de modo que resulte difícil recuperar lo perdido.
Apenas 2 años y medio después, somos el país que más deuda soberana emitiera en el mundo ; Macri y la Alianza Cambiemos es el gobierno que más deuda externa tomó superando a China, Rusia, Arabia Saudita y Qatar, entre otros ; Se dolarizaron los precios de los alimentos y de los insumos, dejando el tendal y en menos de un mes produjeron una corrida cambiaria mediante la cual perdieron 10 mil millones de dólares. Para dimensionar la catástrofe, se perdió el equivalente a dos YPF.
Cristina recomendó el espejo retrovisor, no está mal para saber donde estamos parados