El concejal Larocca (UCR) calificó como “saqueo” las sustracciones reiteradas de materiales de valor. “Lamentablemente los concordienses le dimos la espalda y permitimos que fueran objeto de saqueo y de destrucción los elementos culturales allí existentes” indicó. Asimismo aseguró que se “agravió” el respeto a las familias de los deudos.
Hay personal municipal que cuida y limpia el lugar, pero únicamente por las mañanas y las tardes. De noche, la necrópolis queda desguarnecida. “El predio no cuenta con un cerco perimetral, idóneo que impida el ingreso de terceros en horarios nocturnos que saquean lo que encuentran” dijo Larocca. “Da una visión de abandono, si no se lo resguarda, eso es pasto para las fieras. Habría que hacer un refuerzo del muro que muy bajo” dijo Pezzarini (PJ).
“Aún quedan 100 cuerpos depositados entre ataúdes, sepulturas y panteones existentes” agregó Larocca. “Hemos hablado con el resto de los concejales para que en la minuta se le exija al Ejecutivo que arbitre las medidas necesarias para que se le brinde seguridad al predio” expresó el radical.
El valor histórico
Pezzarini, quien es profesor de historia, aseguró que “ya no es novedad” lo que ocurre con el camposanto. “Hace más de 150 años que fue hecho cuando en 1848, el padre Navarro eligió el lugar por encargo de Urquiza y allí fueron trasladados restos de otros cementerios y se fueron agregando de allí en adelante” indicó.
“Lo importante es que hay muchos panteones que todavía están a la vista de figuras del pasado concordiense”. En el Cementerio Viejo están sepultados “los Legerén, por ejemplo. Benito Legerén fue un personaje, comerciante que tuvo mucha vinculación social, gran amigo de Urquiza” dijo Pezzarini.
Otras tumbas ilustres son las de “los Luna, la mayoría provenían de Federal, donde tenían sus campos. Uno de ellos fue el coronel Don Hermógenes Luna, militar y jefe político de aquellos tiempos”. También hay enterrados “combatientes, soldados de Urquiza que fueron recompensados con tierras, con campos y luego se convirtieron en ganaderos de la zona” dijo Pezzarini.
Incluso, reposaron durante algún tiempo los restos de “los Artigas, descendientes de José Gervasio Artigas, hijos de diferentes mujeres y Doña Melchora Cuenca que fue una de las mujeres de Artigas. Todos esos restos fueron llevados por pedido del gobierno uruguayo. Pero queda el panteón intacto”.
Los panteones han sido sometidos a todo tipo de “depredación” dijo Pezzarini. “Se han robado mármoles, han deshecho puertas. Necesitarían un arreglo, aunque sea simple para preservarlos. Hay que hacer un relevamiento para saber quienes estuvieron sepultados porque hay panteones que no tienen ningún indicativo al respecto” agregó.
“Los panteones que quedan en pie hay que ponerlos a la vista del público. Que sea un paso más del circuito turístico de Concordia” explicó. “Se busca mantenerlos en valor para que sean apreciados por las generaciones actuales concordienses que los conocen muy poco” añadió.