Doval aseguró que no tuvo tiempo de retirar todos los elementos antes de que el agua invada el local. “El lunes ese que creció el agua nos metieron un metro y pico de agua acá adentro. Fue imposible, se sacó lo que se pudo; lo que no se pudo no se sacó”, acotó.
“Estamos esperando que nos den una mano. Primero van a atender a la gente que me parece bien pero aparentemente para nosotros no hay nada”, indicó el propietario de M´c Dovals. Sin una asistencia del estado, reabrir “va a ser imposible porque hay que reponer muchos materiales que se rompieron”.
“Somos los que bancamos la costanera desde hace 12, 15 años sin ayuda de nadie. Soportamos inundaciones y nunca tuvimos ayuda así que esperemos que esta vuelta traten de ayudarnos”, indicó Mario. “Nosotros hicimos una inversión todo a pulmón porque no somos ningunos empresarios. Fuimos creciendo de a poquito. El ciudadano de Concordia vio como empezamos con una casita rodante y ahora estamos todos armados pero ahora se nos rompió todo”, indicó Mario.
Arrancar de cero sin dinero
Carlos es el dueño de un local gastronómico ubicado en Mitre y Costanera. El local, construido en madera, está en pie pero consideró que la creciente lo dejó “semidestruido”. “La madera se ha hinchado acá delante, allá atrás, la parte de la parrilla. En todo el perímetro donde hay tejido de madera lo desarmó”, recalcó. Además el agua se llevó bancos y mesas de madera que estaban plantados en la parte delantera del local. Los perjuicios no fueron mayores porque se llevaron ventanas y puertas.
El propietario aseguró que las pérdidas no sólo conciernen a las roturas del inmueble sino también al tiempo en que estuvo cerrado. “Fácil capaz hemos perdido $ 15.000. Hemos perdido fácilmente un mes más otro tiempo que nos lleve reconstruir la costanera, yo le calculo dos meses”, explicó Carlos.
En tanto, sostuvo que esperan una reunión con las autoridades. “Los $ 4000 son solamente para las familias que fueron inundadas. Según lo que escuche yo, el gobernador dijo que la parte de comercio como son pocos acá, no está estudiado o no sé, obvió la pregunta. No dijo ni que sí no que no”, sostuvo el propietario de Gusnai-k.
Asimismo, aclaró que necesitan una ayuda para comenzar de nuevo. “Imaginate que en mi caso, igual que el resto, excepto Yantar que tiene otro negocio, vivimos de esto. Imaginate, estamos parados de hace un mes. No te quedan reservas, no te queda nada. Lo poco que podés hacer y no tenemos trabajo encima”, indicó Carlos. Lamentó no tener otro trabajo de donde sacar dinero para invertir en el local. “Acá tenés que costearlo vos nomás. No hay opciones”, indicó.
“Arrancar de cero sin dinero. Mirá como está todo esto”, dijo señalando el barro que cubre el lugar que solía ocupar el pasto. “No tenés nada lindo acá; todo marrón. Esto va a llevar un tiempo secar, pintar, arreglar”, indicó Carlos.
Waterpolo 5
Alfredo “Gringo” Llane, aquel lateral de Estudiantes de La Plata en la década del 80, tiene canchas de fútbol 5 en la Costanera. El agua aún no abandonó el predio, bajó apenas lo suficiente parta que pueda ingresar al local, y basura de todo tipo quedó entrelazada entres las redes que rodean las canchas. “Realmente ha sido de daños muy grande en donde es muy difícil poder empezar nuevamente”, expresó. “Ha medida que va bajando tratamos de emprolijar, lavar, tratar de ir evaluando daños que se han ocasionado y esperar a ver de que forma podemos recuperarnos”, manifestó.
Respecto de las pérdidas, dijo que se perjudicó: “todo lo que es material del negocio, instalaciones. Sólo eso es lo que pude ver hasta ahora, cuando baje el agua seguiré evaluando”.
Además se mostraba preocupado por la posibilidad de que volviese a llover. “Esto no favorece en nada y va a seguir para más porque aparentemente va a quedar (la altura del río) así como está. Yo me puse a limpiar y fijate que no baja el agua. Es imposible tratar de ir limpiando la mugre”, acotó Llane.
La proximidad de fin de año no genera optimismo, tal como acostumbra. “Uno espera todo el año estas fechas y tuvimos que tropezar nuevamente con esto. Esto es así, habrá que continuar. Espero que aquellos que no nos quieren dar una mano y nos están dando la espalda que si pueden evaluar bien y ver como va a quedar la costanera no va a ser fácil que cada uno podamos arreglar. Sinceramente necesitamos la colaboración de ellos para poder continuar”, indicó el ex jugador.