Los temas que componen el repertorio de Virus, una banda nacida en 1980 y que debió superar la pérdida del cantante Federico Moura en 1988 (actualmente su hermano Marcelo es la voz del grupo), siguen sonando en las radios. Melodías como “Wadu Wadu”, “Pronta Entrega”, “Me puedo programar”, “Luna de miel” y otros tantos garantizan la participación de un público de promedio de edad mayor al que acude a los festivales.
Además acompañarán Kapanga, “una banda muy reconocida a nivel nacional”; Pastillas del Abuelo “con 10 años de vida es impresionante la trayectoria que pudo hacer en tan poco tiempo”; Jóvenes Pordioseros “dentro del rock barrial es la banda más reconocida”, y dos bandas soportes “The Koalas” de Rosario que ya ha estado en otras oportunidades en Concordia y un conjunto local “Bajo Cero”.
Se trata de la primera edición de un festival que podría realizarse una vez al año. “No estábamos teniendo mucha actividad cultural de nivel nacional acá en la zona y decidimos tirarnos a esto que es lo que se acostumbra a hacer por ahí en las grandes ciudad como el Quilmas Rock o el Pepsi Music. Si bien duras más días, es la misma temática de meter cuatro o cinco artistas nacionales en la misma grilla”, reveló Ravasio.
En vez de repartir las bandas en dos o tres días, se concentrarán en seis horas, dado que el festival arrancará a las 16 y finalizará pasada la medianoche. “Son seis o siete horitas a todo rock”, dijo Ravasio. “Estimamos que para el día de la fecha ya no va a haber más anticipadas. Al ser limitadas no hay que dormirse”, añadió el productor.
La contratación de las bandas no es sencilla dado que se necesita un capital inicial para convocarlas debido a que tienen costos importantes. Y además se requiere de la respuesta de la gente. El costo de las entradas ronda los $ 200. Ravasio destacó que es un precio accesible dado que ver a cada una por separado equivale a desembolsar no menos de $ 100. Las entradas son limitadas dado que sólo 4.000 personas es la capacidad máxima del club.
El festival se iba a realizar en La Criolla, al aire libre, pero el fin de semana elegido llovió y no pudieron armar el sonido y la iluminación. En consecuencia, debieron esperar varias semanas para que agenda de las bandas coincidan y no cambiar la grilla.