A pocas horas de que el Senado aprobara declarar la emergencia ocupacional por 180 días, el presidente de la Nación, Mauricio Macri, volvió a rechazar la ley, al considerar que “destruye el trabajo de los argentinos”.
En un acto en la localidad bonaerense de Ezeiza, donde anunció un plan de viviendas, Macri sostuvo que el camino para generar empleo en el país “no es el camino que ha emprendido la política equivocada del Senado de la Nación”.
En ese sentido, dijo estar “sorprendido” de que la oposición “impulse a votar una ley que destruye el trabajo de los argentinos y los perjudica”.
“No es el camino con esa ley, ya hemos visto que no funciona. ¿Por qué repetir las cosas que no funcionan y engañar a la gente si sabemos que vamos a conseguir trabajo, no desde la arbitrariedad sino la creatividad?”, se preguntó el jefe de Estado.
Pero Pichetto salió a responderle: “Yo no soy el dueño del Senado”, remarcó el rionegrino, para recordar luego que “hubo una decisión mayoritaria del conjunto del arco político argentino, que con su decisión acompaña el reclamo de los trabajadores”. Pichetto le recordó además al presidente “que la votación de la emergencia ocupacional tuvo un resultado de más de los dos tercios de los votos”.
En efecto, el resultado fue de 48 votos positivos contra 16 en contra. Exactamente los dos tercios del Senado completo.
Pichetto abundó sobre lo que dijo Macri al referirse a expresiones suyas del pasado y aclaró que “nunca dije que la ley similar que aprobamos durante el Gobierno de Eduardo Duhalde haya sido mala o no haya servido, sino que era una coyuntura más dramática y compleja que la actual”.
Por otra parte y frente a un eventual veto del Poder Ejecutivo, Pichetto señaló que “en vez de confrontar y anunciar futuros vetos, el Gobierno debería transitar el camino del consenso, de acuerdo económico y social entre empresarios y sindicatos”.
“No es que sacamos una ley de manera intempestiva, acá no hubo una respuesta adecuada del Gobierno”, planteó el presidente del bloque PJ-FpV, asegurando que el proyecto que obtuvo media sanción es “equilibrado y racional”, por cuanto “no es retroactivo, no afecta a los nuevos empleos y tiene como finalidad llevar tranquilidad a los trabajadores que viven esta situación de angustia”.