De todas formas, por el momento esta caída no es preocupante, considerando que la baja del viernes respondió en gran parte al pago de Letras del Tesoro en dólares que no fueron renovadas en la licitación del martes pasado, por unos u$s 550 millones, aproximadamente, debido a la preocupación con respecto al eventual pago de la deuda, a pesar de que los principales referentes económicos de la oposición ya se han mostrado a favor de cumplir con los compromisos.
A su vez, el BCRA subastó apenas u$s 11 millones el viernes. En medio de la corrida cambiaria, la entidad que conduce Guido Sandleris subastó de sus reservas u$s 105 millones el lunes, u$s 150 millones el martes, y u$s 248 millones el miércoles, además de los u$s 60 millones diarios a cuenta del Tesoro.
Conocidos los resultados del domingo, el dólar anotó en la semana un alza del 24,8 %, producto de la mayor incertidumbre dentro de la plaza, un fenómeno que en la Argentina se suele traducir en una mayor demanda de dólares como cobertura. También se registró un fuerte incremento en los niveles del riesgo-país, que finalizó en 1.653 puntos básicos, en sintonía con la caída en los precios de los bonos y de las acciones. Pero la noticia de que hay intención de diálogo entre el oficialismo y el candidato opositor generó un escenario de mayor tranquilidad, trayendo cierto alivio a los precios del dólar y de los activos locales.
Uno de los factores que habrá que tener en cuenta para los próximos meses son los vencimientos de Letes en dólares en el sector privado, que ascidenden a u$s 7.000 millones y, en caso de no renovarse, se necesitaría recurrir a las arcas de la autoridad monetaria.
Desde Bull Market Brokers señalaron que “la semana post shock terminó con un roll over del 0% para inversores privados locales, mientras que los del exterior proseguían desarmando posiciones en Lecap de septiembre y octubre, pero a ritmo más lento, esperando el milagro”. También habrá que considerar los vencimientos de Letras del Tesoro en pesos, cuyo monto ronda el equivalente en pesos a u$s 2.500 millones. En caso de no renovarse, esto podría generar un incremento de la presión cambiaria.
Para esta semana, los analistas esperan que el organismo que conduce Guido Sandleris continúe desplegando las medidas necesarias para mantener al dólar por debajo de $ 60. Sostienen que los problemas actuales son de liquidez, lo que obliga al BCRA a salir a intervenir con ventas en sintonía con las del Palacio de Hacienda.
Además, estiman que la tasa de las Leliq podría subir algunos puntos adicionales, en caso de ser necesario, pero confían en que se mantendrá dentro de los niveles actuales.