SITUACIÓN DE LA ESCUELA PUBLICA
DIARIOJUNIO da cuenta a menudo que las escuelas públicas se paralizan: los docentes señalan que faltan escuelas, los sueldos son insuficientes, hacen falta aulas, espacios de trabajo, reparaciones de edificios escolares, mobiliarios, elementos de trabajo, etc. No obstante, el Estado siempre argumenta que no tiene presupuesto para solucionar los reclamos. El secretario gremial de AGMER Concordia, Alejandro Marcone, dijo que días pasados visitaron una escuela que carece del más mínimo resguardo contra el sol y sin embargo el Estado destinará recursos para mejorar la parte edilicia de escuelas privadas (confesionales). Señaló además que es “un reclamo histórico” el tema de los concursos para todos, mientras nosotros tenemos que pasar por concursos, en las privadas son elegidos a dedo” incluso, dijo, “un docente de escuela pública no puede tener dos cargos, sin embargo, un docente de escuela privada, puede trabajar también en la escuela pública”.
EL RECLAMO Y LA POSTURA DE LA IGLESIA
La Iglesia, a través del arzobispo Mario Maulión, habló de “la importancia de analizar los modos para garantizar la calidad presupuestaria, a fin de atender lo que ofrece la nueva ley a todos los ciudadanos”. En otras palabras reclaman más dinero.
En lo conceptual señalan que “la libertad de enseñanza da razón de ser a la educación. No es un privilegio la educación privada, no es de elite. La educación privada surge como consecuencia que los padres tienen el derecho de elegir la educación para sus hijos”. Si este argumento no redujera este derecho a un sector de la sociedad (catolicos), todos los padres y directivos de escuelas privadas laicas podrían reclamar lo mismo. El Estado no puede discriminar, está impedido de hacerlo, sin embargo, más del 90 % del presupuesto Estatal destinado a la educación privada va a parar a las escuelas confesionales manejadas por la Iglesia Católica. La ecuación discriminadora no deja dudas.
En Concordia hay 10.964 alumnos y 877 docentes en los establecimientos privados de los tres niveles. Los establecimientos que reciben un aporte estatal son 27. La cantidad de establecimientos que pertenecen a la Curia son 22, y los laicos son 17.
De esas 17, según el CGE, cinco reciben un aporte mínimo del Estado. En cambio, desde Educación Privada -repartición llamativamente ubicada en el edificio de una escuela privada como el Bachillerato Humanista- sólo mencionaron que dos laicas perciben un aporte mínimo como uno o dos cargos docentes por establecimiento. Las dificultades para clarificar esta cuestión no es responsabilidad del medio sino que se debe al celo con que se manejan los encargados que no facilitan el acceso a la información.
BAR
Bar expresó que para el cálculo del porcentaje se tiene en cuenta la proporción de escuelas estatales respecto de las privadas. “Nosotros tenemos un 22 o 23 % de escuelas privadas respecto a las estatales”, indicó. No obstante, aclaró que el 22 % no cubre el 100 % de los cargos en las escuelas privadas. “Porque a una se le da el 70 %, a otra se le da el 80 %, a otra el 90 y a muy pocas el 100 % aquellas muy, muy pobres”, sostuvo.
La paradoja es que la mayoría de los establecimientos que reciben fondos están bajo el ala de la Curia Católica. Si bien Bar sostuvo que cubren confesionales y laicas. “No todas las privadas son católicas. Las escuelas de los alumnos más ricos de Paraná son todas laicas, nosotros no hacemos diferencias si son laicas o confesionales”, expresó.
En Concordia hay 10.964 alumnos y 877 docentes en los establecimientos privados en los tres niveles. Los establecimientos que reciben un aporte estatal son 27. La cantidad de establecimientos que pertenecen a la Curia son 22, y los laicos son 17. De esas 17, según el CGE, cinco reciben un aporte del Estado. No obstante, tal lo remarcado anteriormente, se desconoce cuales son los establecimientos laicos beneficiados y cuanto dinero reciben. Incluso, desde Dirección Privada señalaron que solo dos laicas recibían aportes del Estado.
DIARIOJUNIO desde hace tres meses que reclama infructuosamente la cifra exacta de dinero que es remesado mensualmente a las escuelas privadas de la ciudad pero aunque desde el CGE aseguran que la información está disponible, parece más un secreto guardado bajo siete llaves.
“Quédese tranquilo que nosotros no beneficiamos a las escuela ricas. No es nuestro espíritu. Nosotros apostamos a que las escuela privadas, donde existen sectores de alumnos menos pudientes y que están cumpliendo un rol que el Estado no ha cumplido, no sólo en la parte pedagógica, nosotros tratamos de beneficiar a ese tipo de escuela”, señaló la titular del CGE. “A los demás se les da un aporte en porcentajes mínimos, no es que uno financia toda la educación donde van los alumnos más ricos”, añadió.
Para definir el porcentaje que le toca a cada una, se realiza un estudio socioeconómico “de cuanto podrían pagar los alumnos y en base a eso se ponen la cuotas y se establece como máximo hasta $ 35, hasta $ 70 y hasta $ 170 en el nivel superior”, expresó Bar. Además, la institución escolar debe calcular cuanto debe recaudar: “para pagar los cargos que nosotros no financiamos”.
¿Porque el Estado aporta a escuelas confesionales donde concurren sectores pudientes? ¿Esto se está revisando en la nueva Ley de Educación? “La ley no dice nada respecto a particularidades. Son términos generales que el Estado financia a la escuela privada cuando hay una necesidad real, y eso nosotros valoramos el aporte que han hecho las distintas instituciones privadas porque complementa el rol donde el Estado ha estado presente”, respondió Bar.
Consultada de nuevo sobre el mismo interrogante, volvió a mencionar que el Estado “no financia el 100 por 100 de los sueldos docentes de las escuelas donde van los alumnos más pudientes”.
Desde el CGE se señala que muchas escuelas privadas no tienen financiamiento del Estado. “Solamente tienen financiamiento pedagógico. Hay escuelas de sectores muy pudientes, acá en Paraná hay dos o tres que son laicas que tienen sólo el reconocimiento pedagógico, no financiero. Con las cuotas, que es alta, se financian los sueldos de los docentes”, indicó.
Bar confirmó que el dinero sólo es destinado al abono de los sueldos. “Eso es lo que paga el Estado. No es 100 por 100. Según la situación económica de los alumnos y el porcentaje de cuotas que pueden pagar nosotros ponemos topes de cuotas pero no obstante hay escuelas en las cuales ni siquiera $ 30 o $ 35 pueden pagar los alumnos. Entonces cobran menos porque son chicos humildes”, expresó.
Como ejemplo de lo anterior, citó la escuela “Solidaridad y Esperanza” del Padre Andrés Servín “que no tienen las cuotas altas que tienen otras escuelas que están más ubicadas en el centro o en otro sector social”.
Bar subrayó que la Provincia también subsidia escuelas privadas y laicas. “Las de educación especial por ejemplo son asociaciones en Concepción del Uruguay, en Victoria. Son grupos de personas que tienen una asociación civil y crean la escuela”, indicó.
También recalcó que el dinero no se entrega en carácter de subsidios. “Es un monto de plata que luego la Dirección hace una redistribución en cargos/horas cátedras. Generalmente los presupuestos se copian del año anterior y con la mayor recaudación año a año se va otorgando los aumentos salariales o dando cobertura a los nuevos cargos que tengan las instituciones”, explicó.
Hay instituciones que tienen un 50 o 60 % de financiamiento del Estado. “Cuando son cuotas muy bajas porque asisten chicos muy humildes, ellos piden el financiamiento del 5º grado. Y si nosotros podemos conseguirles recursos extra-presupuestarios, vía Poder Ejecutivo, se hace todo un trámite administrativo y se incorpora el financiamiento de ese cargo u horas/cátedra de un 2º o 3º año. “Eso no es un elemento o un dato estanco que digamos nosotros tenemos tantos millones para financiar la educación privada”, expresó.