El maratónico encuentro comenzó a las 10 y no están los presidentes de todas las entidades, aunque sí están todas representadas. Al encuentro asisten tres representantes de cada entidad. Entre otros, están Luciano Miguens y Hugo Biolcati, presidente y vice de la Rural; Pablo Orsolini y Ulises Forte, vicepresidentes de la Federación Agraria (FAA), y Carlos Ropell y Miguel Angel Giraudo, por Coninagro. Por Confederaciones Rurales estarían el titular y el vice, Mario Llambías y Néstor Roulet. Desde las entidades reconocieron a Clarín.com que uno de los motivos del hermetismo en el que se lleva a cabo la reunión es el poco margen de acción con el que cuenta la mesa de enlace. A eso se suma que las entidades llegan con posturas más distanciadas entre sí que las que venían manteniendo. Con más de siete horas de reunión, las fuentes bajaron la expectativa sobre anuncios. La discusión «no tiene plazos» sostuvo uno de los voceros consultados.
Por un lado, en Coninagro, que siempre se mostró como la más dialoguista de las entidades, se había llegado a plantear hace pocos días la posibilidad de proponer un levantamiento de toda forma de protesta para esperar una convocatoria del Gobierno. Pero ahora creen que eso es «muy difícil» por lo «confuso» de la situación en las rutas y la convocatoria judicial a ocho productores de la zona de San Pedro.
En el medio, desde la Rural destacan que, si bien el sector sigue en estado de movilización, «ya está levantado» el paro en la comercialización de granos, a pesar de que muchos productores siguen sin vender y algunos continúan en las rutas, ahora copadas por los cortes de los transportistas que exigen que los vuelvan a contratar desde el sector agropecuario. Pero también señalan que la situación es «muy complicada por la intransigencia del Gobierno». Y en CRA, el mandato era, por lo menos hasta ayer, mantener sobre todo la unidad de la mesa de enlace.
Y por otro lado, en la FAA, que desde el origen –y por sus orígenes- se mostró como la más combativa, admiten que tienen «mucha presión» de las bases «para seguir manteniendo el estado de alerta y movilización y volver a generar algún tipo de protesta», que podría ser un acto masivo, un tractorazo, llenar con trailers algunas plazas del interior o seguir en las rutas. «El ánimo está muy complejo y poco está ayudando el Gobierno», insistieron.
