La Comisión de Enlace ruralista destacó las gestiones de la Iglesia y del ombudsman nacional para destrabar el conflicto, al tiempo que afirmó que el sector «se hace eco de los múltiples llamados y gestos tendientes a garantizar la paz social».
Las entidades, asimismo, anunciaron que tras el final de la medida -a las 24 del domingo- se mantendrán en estado de «alerta y movilización». Asimismo, pidieron a las bases que se mantengan al costado de las rutas «en aquellas localidades que lo consideren necesario». En simultáneo, se reforzará la campaña de recolección de firmas para que el Congreso analice el esquema de retenciones.
Además, los ruralistas confirmaron que el lunes asistirán a un encuentro convocado por el ombudsman nacional, al que también fue invitado el Gobierno. La iniciativa tiene como objetivo relanzar el diálogo entre las partes para destrabar el conflicto.
El comunicado fue difundido luego de una extensa reunión entre los presidentes de las cuatro principales entidades agropecuarias, realizada bajo un estricto secreto en el predio de La Rural, en Palermo, para evitar los escraches de los grupos kirchneristas. «Analizaron toda la situación, también el documento de la Iglesia de ayer y las declaraciones del Gobierno nacional diciendo que no les podían pedir a ellos un gesto de grandeza porque ya habían hecho todo», dijeron a Clarín.com desde la Sociedad Rural.
Justamente, una situación particular se registró este mediodía en la sede porteña de CRA: allí concurrieron militantes de la agrupación piquetera oficialista Barrios de Pie para criticar a la entidad y defender al Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y al esquema de retenciones móviles. Enterados, piqueteros de los comedores de Raúl Castells instalaron un «contrapiquete» a una cuadra. Desde la entidad resltaron que todo se desarrolló en calma, por la presencia de policías y porque los dos grupos coincidieron muy poco tiempo en el lugar.
Antes del encuentro de los ruralistas, el vicepresidente de la Rural, Hugo Biolcati, expresó su enojo por el discurso de la Presidenta, quien ayer volvió a cuestionar con dureza el paro y dijo que los productores agropecuarios «pueden estar 90 días sin trabajar porque ganaron mucho».
«Es echar más leña al fuego», criticó Biolcati, quien se mostró pesimista sobre la posibilidad de lograr un acuerdo. Desde su entidad, en tanto, insistieron en aclarar que «el campo no está de paro desde hace 90 días» y que la actual «medida de protesta es suspender la venta de granos para exportación».
