Larreta concurrió a una de las reuniones periódicas con De Pedro acompañado por su ministro de Salud, Fernán Quirós. Juntos, subieron al despacho de Cafiero, donde además del jefe de Gabinete y el gobernador bonaerense (que se sumó en el último tramo), participó la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra. Allí conversaron las distintas alternativas para una nueva fase de la cuarentena, que comenzará la semana que viene. La idea es que el plan que se anuncie abarque a la región del AMBA, por lo que es esencial la coordinación del Gobierno nacional con la Ciudad y la provincia de Buenos Aires. En el cónclave, se evaluaron las distintas alternativas. Según observaron en la Rosada, no sin una cuota de humor, «Kicillof estuvo más por reabrir la industria, Larreta está más albertista».
Give it away
Las salidas de una hora para niños y niñas no formaron parte del combo oficial que llevó el jefe de Gobierno, pero fueron parte del debate que hubo en el encuentro. Sigue habiendo dudas en el Gabinete porteño sobre qué hacer con ese tema y no hay un consenso ni entre los ministros porteños. De hecho, fue uno de los principales puntos de discordia luego de que el presidente indicara que se podría salir por una hora en un perímetro de hasta 500 metros del hogar con menores de edad. La iniciativa siguió recomendaciones de Unicef que, hasta ahora, no fueron tenidas en cuenta por los distritos de mayor población, que decidieron no habilitar las salidas bajo ningún formato.
Reapertura paulatina
La propuesta que llevó Larreta incluye «mantener la cuarentena estricta con una paulatina apertura regida por protocolos ya que los números de la última semana reflejan una cierta estabilidad de la curva, de forma errática, pero pareja al fin», según informaron desde el Gobierno porteño. Todas las reaperturas serán monitoreadas y puede haber marcha atrás si se registra un aumento repentino de los casos de coronavirus. «Al más mínimo síntoma de que despega la curva, retrocedemos y volvemos a la cuarentena total», advirtieron.
La propuesta de Larreta sigue siendo restringir al máximo la circulación de adultos mayores, controlar geriátricos, a lo que se suma en nuevo plan para villas, luego de que escalara la cantidad de casos en los barrios más pobres de la Ciudad. Los funcionarios porteños subrayaron, tras el encuentro, que todas las medidas están «en análisis y se van a consensuar con Nación y provincia». La palabra final la tendrá Fernández.
Desde la Jefatura de Gabinete, en tanto, informaron también que durante la reunión se abordó la «agenda común en la que vienen trabajando, principalmente evaluando la situación en la zona metropolitana en lo referido al tránsito, transporte público, circulación de personas y actividades exceptuadas». Tras varias semanas de insistencia de Larreta sobre algunas actividades económicas, en el Gobierno nacional evalúan habilitarlas. «La obra privada está avanzando en todo el país. Lo mismo el take away. Claro que se probó primero en distritos de menor población», advirtieron.
Tras el encuentro, Cafiero se retiró hacia la quinta de Olivos a reunirse con el presidente. No se descarta que, antes de que se anuncien las nuevas decisiones, haya nuevas conversaciones entre Kicillof, Larreta y Alberto Fernández