En octubre del año pasado, cuando el caso trascendió a la opinión pública, la docente tomó licencia médica por enfermedad. “Pasó todo el año 2006 y a comienzos de 2007, la junta médica, la única que podía levantar este tipo de licencia la cita a la ciudad de Paraná, le hace la revisión y diagnostica que puede retirarse a sus tareas habituales”. Desde la Departamental dialogaron con la docente y la supervisora para determinar la forma de reintegrarse a su trabajo. “Si bien ella podía volver al aula, había todo este trasfondo detrás”, señaló Dri.
“Nosotros no tenemos nada; Educación no tiene nada formalmente como para iniciar una actuación sumario en este caso. Es más, desde Departamental le preguntamos por nota a la Justicia y nos contestó que eso era del ámbito meramente judicial y que no teníamos que tener nosotros intervención”, amplió el funcionario.
El pasado 16 de octubre una mujer durmió a su amante en una vivienda del Barrio Nebel y posteriormente sustrajo una 4×4 para llevarse varias cosas de la finca, pero terminó chocando el vehículo en la esquina de Chabrillón y Lamadrid. La investigación policial la identificó y determinó que vivía a pocas cuadras del accidente y que era docente de la escuela Diógenes de Urquiza.
La misma mujer, a mediados de diciembre pasado, sedujo a un hombre de 36 años que conoció por Internet, oriundo de Concepción del Uruguay. La policía volvió a sospechar de la maestra y se procedió a un allanamiento en su domicilio donde se encontraron parte de los elementos sustraídos. Esta vez la mujer se resistió a ser detenida, mordió a un efectivo policial y a la causa por robo se agregó otra por resistencia y lesiones.
El acuerdo con la docente estipula que no debe volver al aula sino que debe cambiar de función. Durante un tiempo estuvo en la Departamental, mientras el CGE autorizaba el cambio de funciones. “Hoy está afectada a tareas de biblioteca mientras su suplente continúa en el aula. Esta monitoreada por la dirección, a veces también cumple tareas en dirección, así que el contacto con los alumnos es mínimo”, señaló.
Dri explicó que si la docente quisiera volver al aula, nada se lo podría impedir. “Nada más este acuerdo que tenemos”, aclaró. Para que un docente sea separado, “tiene que haber todo un seguimiento, un informe de su actuación administrativa o docente que lo amerite”. Pero en este caso, todos los informes conceptuales como docente de aula son “como mínimo buenos”.
En la Departamental no se ha recibido desde la Escuela, de manera formal y por escrito, alguna inquietud al respecto. “Lo que sí en la Escuela propiamente han recibido un llamado telefónico, está esta inquietud de los medios”, expresó Dri. El directivo recalcó que se debe respetar el principio de inocencia “hasta que no se demuestra otra cosa, más allá de lo mediático”.
